Emergencia invernal en el sur del país
Derrumbes en Nariño dejan incomunicados a cinco mil campesinos
Ante las fuertes lluvias que ocurren en el departamento Nariño se han presentado derrumbes en diferentes sectores que dejan incomunicados a más de cinco mil campesinos.
Los deslizamiento han dejado incomunicadas a más de 35 veredas y afectando la movilidad de los habitantes de esta región.
Las zonas más impactadas son Policarpa, Samaniego y Santa Cruz de Guachavés, donde los derrumbes destruyeron tramos completos de las vías rurales.
Según la Secretaría de Infraestructura de la Gobernación de Nariño, al menos 30 kilómetros de carreteras regionales han resultado dañadas por la intensidad de las precipitaciones.
Alerta
En la vereda Arrayanes, campesinos que se desplazaban por la zona lograron escapar ilesos cuando un gigantesco alud de tierra cubrió la vía interdepartamental.
El primer derrumbe reportado se registró en la ruta que conecta el resguardo indígena de El Sande con Guachavés, donde toneladas de material cubrieron completamente la banca carreteable.
Aunque no se reportan víctimas, la magnitud del daño mantiene aisladas a varias comunidades rurales que dependen de estas vías para el transporte de alimentos y el acceso a servicios básicos.
Por su parte, la Dirección Administrativa de Gestión del Riesgo de Desastres (DAGRD) de la Gobernación de Nariño adelanta la coordinación de labores de remoción de escombros y apoyo logístico con personal y equipos de emergencia.
En municipios como Sandoná, Linares, Cumbitara y Santa Bárbara de Iscuandé, también se han reportado afectaciones por inundaciones y el desbordamiento de quebradas.
Las autoridades mantienen un monitoreo permanente en las zonas críticas y adelantan evaluaciones de daños para implementar acciones de rehabilitación y recuperación.
Sin embargo, el riesgo continúa latente ante la persistencia de las lluvias, que podrían agravar la situación en las próximas horas por lo que la alerta se mantiene en el departamento.