La economía del Valle apuesta por un repunte firme en la segunda mitad de 2025

Tras un primer semestre marcado por la desaceleración de ventas y ajustes en el empleo, las empresas del Valle del Cauca encaran la segunda mitad de 2025 con señales claras de optimismo.

Así lo revela la más reciente Encuesta Ritmo Empresarial (ERE), que muestra una mejora significativa en las expectativas de crecimiento, inversión y contratación entre los empresarios de siete cámaras de comercio de la región.

A pesar de las tensiones derivadas del contexto económico nacional, el tejido empresarial vallecaucano proyecta un cierre de año con repunte en la demanda y una recuperación sectorial más amplia de la que se observó en 2024.

De la cautela al optimismo: 49,6% espera vender más en el segundo semestre

La cifra que marca el cambio de ánimo es contundente: 49,6% de las empresas afiliadas a las Cámaras de Comercio del Valle espera un aumento en sus ventas en el segundo semestre de 2025 frente al periodo anterior.

Dentro de ese grupo, destaca que 38,5% proyecta incrementos superiores al 20%, señal de una expectativa de reactivación más acelerada.

Este optimismo contrasta con los resultados del primer semestre, cuando 35% de las compañías reportó caídas en sus ventas, reflejando los efectos de la baja demanda, los altos costos financieros y la incertidumbre macroeconómica.

La mejora en las proyecciones sugiere que las empresas anticipan una estabilización del consumo, un mayor dinamismo sectorial y el impacto positivo de temporadas comerciales en la segunda parte del año.

Buga lidera el entusiasmo; Cali, Palmira y Tuluá también repuntan

Al analizar las ciudades del Valle, la encuesta destaca diferencias notables. Buga se consolida como la localidad más optimista, con más del 55% de empresarios esperando un crecimiento en ventas.

Le siguen Tuluá, Cali, Cartago y Palmira, donde las expectativas se mantienen por encima del 47%, evidenciando una recuperación más homogénea en el corredor central del departamento.

El comportamiento de Buenaventura también resulta relevante: aunque el puerto afronta dificultades estructurales, las empresas registran un nivel de optimismo cercano al promedio departamental, impulsado por el aumento de inversiones y el comercio exterior.

Industria y construcción: los sectores más dinámicos

Por sectores económicos, la industria aparece como el motor de la recuperación: 56,3% de las firmas industriales estima un aumento en el valor de sus ventas para la segunda mitad del año, superando a comercio, servicios y agro.

Este comportamiento responde a varios factores:

• Mayor normalización de cadenas de suministro.
• Incremento de pedidos nacionales.
• Mayor capacidad exportadora en algunas subramas.

La construcción, por su parte, registra el mayor optimismo en contratación: 22,9% de las empresas espera aumentar su número de trabajadores, una cifra que duplica la de varios sectores y refleja la reactivación de proyectos urbanos y de infraestructura.

En comercio y servicios también se percibe un repunte moderado, con más del 49% de empresarios proyectando un segundo semestre favorable, impulsado por las temporadas de mitad de año y fin de año.

Inversión: señales de reactivación que se consolidan

Las expectativas de inversión ratifican el giro en el ambiente empresarial. Más del 20% de los empresarios de las 22 cámaras de comercio del país y 34,5% de los de Buenaventura planean realizar inversiones entre julio y diciembre.

En el Valle, las empresas ven con mayor claridad oportunidades para expandirse, invertir en maquinaria, tecnología y remodelación de espacios.

Aunque el acceso al crédito sigue siendo un desafío por las altas tasas, el aumento en la intención de invertir es una señal relevante de confianza hacia el cierre del año.

Contratación laboral: estabilidad con matices sectoriales

Si bien la mayoría de empresas del Valle no planea grandes expansiones en empleo, el panorama es más favorable que a comienzos de año.

En promedio, entre 10% y 17% de las empresas por sector esperan incrementar su planta de personal, con la ya mencionada construcción como líder (22,9%).

La encuesta evidencia que las compañías se enfocan en mantener su nivel actual de trabajadores, pero empiezan a abrir espacios para contratar en áreas específicas, especialmente en servicios, logística y proyectos industriales.

Un entorno aún retador: incertidumbre y costos siguen frenando a algunas empresas

Pese al optimismo creciente, los empresarios siguen identificando obstáculos importantes. La incertidumbre política y económica continúa siendo el principal problema del entorno empresarial, afectando decisiones de inversión y contratación.

A esto se suman:

• La carga tributaria, señalada entre los cinco principales problemas.
• La falta de demanda, que afectó a comercio y servicios.
• La competencia elevada, especialmente en ciudades como Cali y Barranquilla.

Perspectiva regional: más optimismo que en 2024, pero con prudencia

La ERE confirma que el Valle del Cauca entra al segundo semestre de 2025 con mejores perspectivas que el año pasado. En 2024, gran parte de los sectores preveía un deterioro en la economía departamental; hoy, Cali, Buenaventura y Tuluá muestran un repunte en confianza, y más del 40% de los empresarios cree que la situación económica del departamento mejorará.

Sin embargo, la prudencia todavía marca las decisiones. Las empresas esperan un segundo semestre más dinámico, pero aún no hablan de una recuperación plena.

La cautela está impulsada por el entorno nacional: inflación aún elevada, tasas de interés altas y presiones fiscales que podrían afectar la demanda.

Un Valle que se prepara para recuperar ritmo

En medio de un año complejo para el país, los resultados de la Encuesta Ritmo Empresarial muestran un mensaje claro: el tejido empresarial del Valle del Cauca espera cerrar 2025 con mejores ventas, más inversión y una recuperación progresiva del empleo.

Aunque persisten desafíos, el optimismo moderado que reflejan las empresas indica que el segundo semestre será decisivo para reafirmar la recuperación y encaminar al departamento hacia un 2026 más estable.

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