Panorama de junio
La incertidumbre fiscal se toma la agenda económica
En un contexto global marcado por la expectativa frente a un inminente choque arancelario y las tensiones fiscales, los mercados mantienen la cautela.
De acuerdo con el más reciente informe de Itaú Colombia, la resiliencia de la actividad económica en Estados Unidos ha sido contrarrestada por señales de deterioro fiscal, lo que ha llevado a la Reserva Federal a postergar decisiones de reducción de tasas de interés, manteniendo la expectativa de un posible recorte recién para diciembre de este año.
Este escenario de prudencia también se refleja en la economía colombiana.
A nivel interno, el Marco Fiscal de Mediano Plazo (MFMP) se convierte en el eje de atención.
Las presiones inflacionarias derivadas del fenómeno de indexación —especialmente por el alza de precios en los arriendos— han obligado a Itaú a revisar al alza su pronóstico de inflación para el cierre de 2025, ubicándola en un 5,1%, frente a proyecciones anteriores más optimistas.
Además, la firma anticipa que la tasa de política monetaria del Banco de la República se ubicará en 8,5% para fin de 2025 y 7,75% para fin de 2026, manteniéndose en niveles relativamente elevados.
Esta estimación sugiere que, aunque la inflación ha bajado frente a los picos del año anterior, las condiciones estructurales del mercado y la incertidumbre política interna seguirán pesando sobre las decisiones del banco central y podrían incluso frenar una baja más acelerada de tasas.
El informe de Itaú destaca que la combinación de choques externos —como la posibilidad de nuevas barreras comerciales desde EE. UU.— con la fragilidad fiscal interna podría dificultar los ajustes macroeconómicos que requiere el país, en especial en un año preelectoral donde el gasto público tiende a ser menos restrictivo.