La revolución de la Inteligencia Artificial en el marketing

Avanzamos en nuestro recorrido por las autopistas de la Inteligencia Artificial en “Mi talento es negocio 2024”.

Este evento organizado por el Diario Occidente y la Gobernación del Valle, tiene como objetivo ayudar a comprender cómo esta tecnología está transformando los procesos dentro de las compañías, optimizando tiempos y costos operativos.

En un contexto en el que la inteligencia artificial (IA) se consolida como una de las herramientas más disruptivas de nuestra era, conversamos con Carolina Vaca, directora del programa de mercadeo y publicidad de la Universidad de Compensar.

Experta en marketing y educación, para entender cómo esta tecnología está transformando procesos en la universidad y las estrategias de marketing en las organizaciones.

Carolina, desde la perspectiva universitaria, ¿Cómo percibe la apropiación de la inteligencia artificial? ¿Estamos preparados o aún prevalece el temor?

Excelente pregunta, Alexandra. Pienso que la IA ya no es una simple tendencia, es una realidad de la que todos estamos hablando.

Aunque al principio existía cierto temor por lo desconocido, hoy en día hemos superado esa barrera.

La IA no es algo que deba generar miedo, sino que debemos verla como una herramienta poderosa para optimizar procesos y facilitar nuestras labores.

En el ámbito educativo, las universidades estamos incorporándola en los planes de estudio.

Personalmente, ya estoy implementándola en los programas académicos que manejo, porque debemos enfocarnos en entender cómo sacarle el mayor provecho, siempre considerando aspectos éticos como la privacidad y la confidencialidad de los datos.

Desde el punto de vista del marketing, ¿cómo puede la IA mejorar la personalización de las estrategias?

De manera sorprendente. La IA se centra en automatizar procesos mediante algoritmos, pero su mayor aporte está en el análisis de datos.

Anteriormente, los datos se utilizaban para procesos logísticos o productivos; hoy se aplican en áreas como el servicio al cliente, la segmentación de mercados y las estrategias comerciales.

Por ejemplo, gracias a la IA, las empresas pueden procesar grandes volúmenes de datos en tiempo real, filtrar cuáles son realmente valiosos y utilizarlos para caracterizar al consumidor.

Esto permite identificar patrones de comportamiento y anticiparse a las necesidades del mercado.

¿Puedes compartir algún ejemplo de cómo la IA optimiza campañas de marketing?

Claro, uno de los ejemplos más interesantes es la inteligencia artificial generativa.

Un caso emblemático es ChatGPT, que en 2022 revolucionó la forma en que las empresas procesan datos y generan contenido.

En email marketing, por ejemplo, la IA analiza y categoriza mensajes, permitiendo enviar comunicaciones al cliente en el momento óptimo, optimizando tiempos y recursos.

En el comercio electrónico, plataformas como eBay han implementado asistentes virtuales que procesan información en tiempo real para ofrecer a los usuarios productos que se ajusten exactamente a sus necesidades.

En redes sociales, los algoritmos de Instagram o Facebook ya no solo muestran contenido, sino que predicen lo que el usuario desea ver, logrando un nivel de personalización impresionante.

Un ejemplo curioso es Coca-Cola, que utilizó IA para desarrollar un prototipo de gaseosa llamado “Coca-Cola Y3000”, pensando en las tendencias de consumo del futuro.

Es una forma de proyectar cómo será el mercado en el año 3000.

La segmentación siempre ha sido clave en el marketing. ¿Cómo la IA está redefiniendo este proceso?

Tradicionalmente, la segmentación dependía de métodos como el análisis demográfico o geográfico, pero la IA ha introducido el “targeting de precisión”.

Ahora, la IA procesa datos en tiempo real, identificando patrones y reduciendo significativamente el margen de error en la definición del público objetivo.

Por ejemplo, antes necesitábamos herramientas complejas para analizar ingresos, edades o comportamientos de compra.

Ahora, con un sistema de IA, podemos identificar no solo quién es nuestro consumidor ideal, sino también cómo se comportará en el futuro.

Esto no solo mejora la retención y fidelización, sino que nos permite ser más creativos e innovadores en las estrategias.

Hablando del futuro, ¿cómo ayuda la IA a predecir tendencias y proyectar comportamientos?

Aquí entra en juego el marketing predictivo. Esta técnica combina IA con análisis de tendencias para identificar patrones en el mercado y tomar decisiones anticipadas.

La IA genera modelos predictivos que permiten a las empresas anticiparse a los cambios en las preferencias de los consumidores, lo cual es cruciales en un mercado tan dinámico como el actual.

Un ejemplo práctico es cómo Spotify usa IA para analizar y clasificar podcasts, traduciéndolos a otros idiomas manteniendo la calidad.

Esto no solo amplía su alcance, sino que les permite explorar nuevas líneas de negocio.

¿Y qué opinas del impacto de la IA en la publicidad?

La IA ha revolucionado la publicidad en todos los sentidos.

Las plataformas ahora identifican patrones de consumo para mostrar anuncios hiperpersonalizados.

Esto genera una conexión más fuerte con el consumidor, incrementando la efectividad de las campañas.

Además, herramientas basadas en IA ayudan a los creativos con el diseño de contenido, desde la edición de fotos hasta la generación de videos.

Así, el equipo puede enfocarse en la estrategia, mientras la IA se encarga de las tareas operativas.

Finalmente, Carolina, ¿qué le dirías a quienes aún ven la IA como una amenaza?

Que la IA no es un reemplazo, sino una extensión de nuestras capacidades.

Si bien puede haber temores iniciales, debemos entender que es una herramienta diseñada para ayudarnos, no para sustituirnos.

En marketing y publicidad, su mayor virtud es la eficiencia, permitiéndonos concentrarnos en la parte estratégica y creativa.

La clave está en aprovechar su potencial, entender a nuestros consumidores y usar esos datos de manera ética y responsable.

Si logramos esto, las posibilidades son infinitas.

Con esta conversación, queda claro que la IA no es solo una tendencia pasajera, sino un motor de transformación en áreas como la educación y el marketing.

Más que temerle, debemos aprender a integrarla y usarla como aliada en nuestra búsqueda de innovación y crecimiento.

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