Cali, noviembre 12 de 2025. Actualizado: miércoles, noviembre 12, 2025 09:54
Para fortalecer la inclusión financiera
Anif propone flexibilizar los techos de tasas de interés
El más reciente Informe de Coyuntura Económica de Anif advierte que la actual regulación de la tasa de usura está limitando el acceso al crédito formal, especialmente entre los hogares y empresas de menores ingresos.
El centro de estudios plantea que flexibilizar los techos de las tasas de interés podría ampliar la inclusión financiera y reducir la dependencia del crédito informal en Colombia.
Según los cálculos del equipo de investigaciones de Anif, un aumento de un punto porcentual en el techo de la tasa de usura generaría un crecimiento adicional de 0,69 puntos porcentuales en la cartera de consumo y de 0,43 puntos en la cartera comercial, demostrando una relación directa entre la flexibilización de tasas y el acceso al crédito formal.
La entidad explica que el principal problema radica en la forma como se calcula la tasa de usura —1,5 veces la Tasa de Interés Bancario Corriente (TIBC)—, la cual incluye en su promedio los créditos comerciales de grandes montos y bajas tasas, reduciendo artificialmente el techo aplicable al crédito de consumo.
ANIF propone calcular la TIBC solo con líneas de consumo, lo que elevaría la tasa máxima y permitiría aumentar la cartera de consumo en 7,9 billones de pesos (3,9%) y la comercial en 8,9 billones (2,4%).
Efecto inverso de la regulación actual
Aunque la tasa de usura busca proteger a los usuarios de cobros excesivos, Anif sostiene que ha producido el efecto contrario.
Al fijar techos bajos, las entidades financieras desincentivan el préstamo a segmentos de mayor riesgo, como trabajadores informales o microempresarios, empujándolos hacia prestamistas informales e incluso ilegales.
De acuerdo con la Encuesta de Endeudamiento Anif, las empresas enfrentan tasas de interés anualizadas de hasta 666% en el crédito informal, lo que evidencia la magnitud del problema.
Inclusión financiera: tarea pendiente
En 2024, solo el 35,5% de los mayores de edad en Colombia contaba con un producto crediticio activo, cifra que refleja una profunda brecha de inclusión financiera.
Para ANIF, la regulación de tasas debe equilibrar la protección al consumidor con la ampliación del acceso formal, de modo que el sistema financiero pueda atender también a los hogares vulnerables sin elevar excesivamente su riesgo.
El documento, elaborado dentro del programa Colombia Progresa 2630, plantea una agenda de política pública que oriente al próximo gobierno (2026-2030) hacia una mayor inclusión crediticia, desarrollo del mercado de capitales y flexibilización regulatoria.
“El reto no es bajar las tasas a toda costa, sino lograr un sistema de precios del crédito que incentive la competencia, reduzca la informalidad y fortalezca la inclusión financiera”, concluye el informe.

