Ante denuncia de peces muertos
Agua de río Guadalajara está libre de contaminación química
Ante la mortandad de peces que se presentó hace algunos días en el río Guadalajara, la CVC realizó un análisis de sus aguas y confirmó que el principal río de la ciudad de Buga, está libre de contaminación química.
La entidad ambiental realizó un análisis de las aguas luego de la denuncia ciudadana en redes sociales sobre la mortandad de los peces.
Un equipo de especialistas llevó a cabo un análisis exhaustivo sobre la mortandad de peces, entre los que se encontraban especies como rollizo, sabaleta y sardina, en laboratorio de la CVC, recertificado como uno de los mejores del país y generador de información de alta calidad.
La investigación se centró en una muestra de nueve peces.
El coordinador del área de piscicultura de la CVC Luis Alfonso Gaviria de la Cruz, indicó que “este resultado reafirma que las aguas del río Guadalajara están libres de contaminación química y conservan su vitalidad natural, este valioso ecosistema sigue siendo el hogar de varias especies de peces nativos, lo que demuestra que el río está saludable y lleno de vida”.
El funcionario agregó que “la comunidad puede estar tranquila, el río sigue siendo un pilar de equilibrio natural y biodiversidad, donde la vida acuática prospera y se mantiene en armonía”.
Sobre los peces
Al referirse a los peces muertos, indicó que la descarga de lodos provenientes de la limpieza de la bocatoma de la derivación Chambimbal en el río Guadalajara fue la causa principal de la aparición de más de un centenar de estos en uno de sus tramos del río, concretamente el sector El Vergel en el municipio de Buga.
Gaviria agregó que “los peces, especialmente estas especies que son más sensibles, sufrieron las consecuencias de la acumulación de finas partículas de arena en sus branquias y una preocupante reducción del oxígeno disuelto en el agua. Estas condiciones críticas afectaron gravemente la capacidad respiratoria de los animales, llevándolos a la muerte en un corto periodo de tiempo”.
Los expertos realizaron una serie de detalladas observaciones, que incluyeron un registro fotográfico y biométrico de los ejemplares, se examinaron minuciosamente las branquias, la cavidad interna, el tracto intestinal y el contenido estomacal de los peces, cuando fue posible.
La CVC, articulada con entidades como el Consejo Municipal para la Gestión del Riesgo de Desastres de Buga, continua el monitoreo cerca el río, desde la zona alta hasta su cabecera, con el fin de evaluar cómo cambia la calidad del agua a lo largo de su trayecto.