Llamado a ciudadanía
Alertan sobre peligros de reptil exótico
Una alerta lanzó la CVC ante las amenazas para la salud y los ecosistemas que genera el gecko leopardo, y pidió a la ciudadanía abstenerse de tenerlo como mascota.
La entidad ambiental indicó que aunque parezca inofensivo, la introducción en Colombia de este reptil como especie exótica ha generado desequilibrios ecológicos: se reproduce sin control, compite con reptiles nativos y puede transmitir enfermedades, generando impactos negativos en ecosistemas nacionales.
Según los profesionales de la CVC, está lejos de ser una mascota adorable, más bien, se puede convertir en un riesgo silencioso.
Recientemente, uno de estos ejemplares fue entregado a la Dirección Ambiental Regional Centro Sur de la CVC, en Guadalajara de Buga, por un joven que, sin conocer el daño que puede causar, lo había mantenido ilegalmente.
La CVC indicó que el gecko leopardo no solo representa un riesgo ambiental, sino también un riesgo para la salud humana, ya que puede portar la salmonela, una bacteria que se transmite por contacto con superficies o heces contaminadas, y provoca síntomas como diarrea, fiebre, vómito y dolor abdominal.
Características
La CVC anotó que esta especie no pertenece a nuestros ecosistemas, por lo que al escapar o ser liberado, puede convertirse en una especie invasora con graves consecuencias ambientales.
Además indicó que este reptil es un vistoso cazador nocturno, con ojos hipnóticos y pasos sigilosos. Aunque su apariencia lo hace popular como mascota, su presencia fuera de hábitats naturales altera los ecosistemas de Colombia.
El gecko leopardo es un reptil llamativo que muda su piel con frecuencia y almacena agua en su cola, como parte de su adaptación natural.
Pese a su apariencia atractiva, no debe ser considerado una mascota, ni mantenerse en peceras, ni en nuestros ecosistemas, ya que es una especie exótica que puede afectar el equilibrio ambiental.
Originario de Asia Central, este gecko habita en regiones semidesérticas y rocosas de países como Kazajistán, Pakistán, Afganistán e India.
Su entorno natural se caracteriza por temperaturas extremas entre el día y la noche, vegetación escasa y suelos arenosos o arcillosos.
Durante el día, se refugia en madrigueras frescas, grietas entre rocas o bajo cortezas, y solo sale al atardecer o en la noche para buscar alimento.
Es insectívoro y su dieta incluye grillos, saltamontes, arañas, escarabajos, gusanos y larvas, incluso, otros lagartos más pequeños.
En estado salvaje, caza al acecho, esperando que sus presas se acerquen para atraparlas con rapidez. Su cola, además de almacenar agua, guarda grasa y nutrientes, lo que le permite sobrevivir en condiciones difíciles.