Alerta en la economía colombiana

Norma Hurtado Sánchez

Los resultados recientes de la actividad económica en Colombia, publicados por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), han encendido las alarmas respecto al futuro del país.

La disminución en la inversión y la contracción en sectores fundamentales como la construcción, la manufactura y el comercio son indicadores preocupantes que no podemos pasar por alto.

El decrecimiento es una noticia desfavorable que impacta negativamente en la calidad de vida de los colombianos. ¿Por qué razón? Porque la generación de nuevos empleos no puede prosperar sin un crecimiento óptimo en la actividad económica.

Sin generar confianza y sin una estrategia clara de recuperación por parte del Gobierno nacional, resultará difícil enderezar el rumbo.

En momentos como estos, es fundamental contar con un liderazgo que tome decisiones responsables para impulsar la confianza de inversionistas y empresarios.

Necesitamos medidas que fomenten la inversión, generen empleo y fortalezcan nuestra economía. En este sentido, proponer alternativas irresponsables, como el incumplimiento de la regla fiscal, solo agravará la situación y aumentará la incertidumbre.

No podemos perder de vista que la mejora real en la calidad de vida de los colombianos está directamente vinculada al desempeño de la economía nacional.

Las cifras reveladas por el Dane son una primera alerta, pero no es momento de bajar la guardia. El presidente tiene la oportunidad de recomponer el rumbo, pero para lograrlo debe actuar con responsabilidad, generar confianza y buscar soluciones concretas.