El factor Zombi
Ya estamos a un año para que el señor Gustavo Petro termine su mandato y más de un colombiano reza para que así sea, pero se debe decir que al respecto existe una preocupante incertidumbre.
Yo también tengo mis dudas. Lo que estamos viviendo desde hace un tiempo así nos lo indica.
La semana anterior dio de baja a ocho generales más de las FF.AA., debilitándolas mucho más.
Compra naves suecas pero ordena no utilizarlas. Todavía existen aviones kafir en tierra que están disponibles, pero inamovibles.
Mientras tanto, las “fuerzas” irregulares tomándose todos los días distintas regiones del país, cometiendo masacres y asesinando soldados y policías, y la voz del “comandante en jefe” no se oye absolutamente, ni siquiera para decir que lo siente.
Presentan una nueva reforma tributaria con una “ley de financiamiento”, aduciendo falta de recursos para poder cumplirle al país y, uno se pregunta: porque en tres años de gobierno no se cumplió con esa obligatoria función del gobierno nacional, aduciendo que el gobierno de Iván Duque se robó el Tesoro Público, lo que no es cierto.
Desde el principio se notó cual iba a ser el rumbo fiscal de esta nación nuestra. El dinero de los juegos panamericanos desapareció y de allí en adelante se dejó a los deportistas con medallas olímpicas y otros en ciernes, viendo un chispero.
Igual sucedió con la plata de la participación legal que le corresponde a cada departamento y ésta se quedó en una nebulosa ideológica, es decir, nada para aquellas regiones que no compaginan con la izquierda.
Acaba con la producción de carbón, gas y petróleo, solo para que el país decrezca económicamente, cuando se ve que en países comunistas no cometen semejante torpeza.
Según esa ideología un país pobre es más fácil de gobernar y aquí hemos cerrado ojos y oídos a semejante adefesio.
Son muchas las cosas que este gobierno ha cometido contra el país, entre las que se destaca el copamiento de zonas importantes por parte de los irregulares.
Pareciera que es para justificar, vaya a saber uno, la suspensión de elecciones 2026 y quedarse un tiempo indefinido en el poder.
Esto que vivimos me recuerda que los cubanos con su talento natural para el humor negro bromeaban con ese lema “¡socialismo o muerte!”, el que consideraban redundante, pues para ellos ambas significan la misma cosa.