El mundo de los libros
A propósito del Oiga, Mire, Lea que esta semana vivimos en Cali, quiero referirme a algunas noticias que ha aparecido en los últimos 15 días en distintos medios de comunicación.
De un lado la influencer española María Pombo, desató controversia con sus afirmaciones: “leer no nos hace mejores personas”.
De otro lado se publica un estudio norteamericano en el que se plantea que la lectura como placer ha disminuido un 40% en los últimos 20 años.
Y en Colombia tanto El Espectador, como El País de Cali anuncian la desaparición más o menos pronta de sus ediciones escritas.
No tengo dudas sobre la realidad: el leer no nos hace mejores personas… el serlo depende de opciones éticas que pueden o no estar ligadas a la lectura.
De alguna manera la lectura puede darnos elementos para ser más críticos; el que la criticidad se traduzca en “bondad” es algo muy distinto.
Además el mundo de los libros y las relaciones que establecemos con él, es complejo y variado y no se puede simplificar en conclusiones fáciles.
Nuestro siglo XXI no es el universo de las grandes casas con salas de bibliotecas espaciosas, cómodos sillones y sobre todo mucho tiempo libre para leer…Sin embargo la sociedad ha desarrollados diferentes modelos y alternativas para acercarnos al mundo de las letras.
Es cierto que la lectura siempre ha sido una práctica minoritaria en nuestras sociedades pero ello no impide que sea un pesar que la dedicación a los libros haya disminuido drásticamente según dicen.
Porque lo que si nos puede dar la lectura es profundidad, reflexión, desarrollo del pensamiento… Vivimos en unos tiempos en los que hay “un océano de conocimientos (yo diría de información) con un centímetro de profundidad” y ello en parte se debe a que nuestras informaciones y pensamientos vienen de las redes sociales y los “tic-toc”, informaciones que nos llegan a los teléfonos celulares con sus pantallas que caben en la mano.
Por todo ello, insisto: es imprescindible que vivamos hasta el fondo un festival de la cultura como el que tenemos estos días en Cali: el OIGA MIRE LEA.
Una oferta amplísima que en su mayoría nos remite al mundo de los libros. Quiero destacar ahora la presencia de Dolores Reyes, escritora argentina y de Lydia Cacho escritora y periodista Mexicana… ambas en su trabajo dialogan con el feminismo en diferentes formas.
La escritora argentina, es una autora postmoderna que en sus novelas: Cometierra, pero sobre todo Miseria, explora el mundo de la sororidad y relaciones de apoyo entre mujeres.
Lydia, defensora de Derechos Humano, ha adquirido reconocimiento por sus trabajos importantes en contra de la trata de blancas y de la esclavitud sexual.
Han sido sonadas las demandas y procesos legales en su contra y las múltiples amenazas de muerte que ha tenido por su trabajo.
Es realmente un privilegio poder escucharla y conocerla. Autora que ha publicado no menos de 20 libros de los cuales algunos estarán a la venta en la Biblioteca Departamental en estos días.
No se trata de ser agorera de anuncios de catástrofes… Las nuevas generaciones encontrarán formas diversas de cultura si los libros se repliegan sobre sí mismos en su propio pasado; pero es indiscutible que es necesario combatir ese “centímetro de profundidad” latente en las comunicación por redes y por celulares.
Este año el festival de la Biblioteca trae un buen número de escritores y escritoras más jóvenes, esto es alentador y es una invitación especial a las nuevas generaciones.