Es cuestión de pandebono
Jairo Varela, no paraba, llevaba más de 12 horas con Grupo Niche en su estudio, grababan unos arreglos, pero no hallaban un estribillo para hacerle coros a “Cali ají”.
Fatigados, aplazarían el ensayo, pero uno de sus músicos murmuró, insinuante: Maestro… esto es cuestión de pandebono. Jairo, feliz, reaccionó, lo tenemos…así será el coro: “Esto es cuestión de pandebono”.
En las ferias de mi Cali Bella, cuando por la calle Quinta los desfiles van pasando y los bailarines así corean, ocurre algo subliminal, se revitalizan.
Pero, se formó un gran lío entre “Cali pachanguero” y “Cali ají”, ambas se disputan el podio. Lo cierto es que pachanga con hambre, no dura.
José Gerardo Atehortúa Cruz, con su libro “LA CUESTIÓN DEL PANDEBONO”, (lanzamiento el 15 de agosto a las 5:30 PM, Auditorio Mercurio de Oro de Fenalco), quiere desvirtuar y aclarar algunas aseveraciones sobre el origen del emblemático y exquisito producto.
No es un libro de gastronomía, sino de investigación histórica, aclaratorio de mitos y leyendas con que algunos descrestaron a quienes gustamos del mecato vallecaucano.
En su libro, José Gerardo se atreve a desvirtuar la leyenda de que el nombre de “pandebono”, se originó porque lo habían inventado en la hacienda Bono, propiedad de unos italianos inmigrantes.
Esta todavía no existía cuando los vallecaucanos ya deleitaban los paladares. Estoy seguro, que san Jairo Varela, en un intervalo con los querubines, se apasionará leyendo éstas páginas, y escribirá una canción celestial, que sus legatarios volverán terrenal.
Atehortúa continúa la misión cultural de Víctor Manuel Patiño (1912-2001), investigador de la Historia de la Cultura Material en la América Equinoccial.