La Biblioteca Departamental
La Biblioteca Departamental de Cali, es un patrimonio absolutamente valioso de los caleños y los vallecaucanos. Desafortunadamente a veces cambia su dirección al vaivén político pero en los últimos 10 o 15 años han pasado por ella directoras realmente buenas.
En este momento, con la dirección de Fernando Tamayo, la Biblioteca afianza su gestión cultural y sus aportes a la ciudad y al departamento.
Es importante que entre todos y todas cuidemos este espacio y lo hagamos crecer cada día más.
Hace unos días estuvimos en el lanzamiento de la última novela de Gustavo Álvarez Gardeazábal, en un lleno total del auditorio Diego Garcés Giraldo.
Fue un encuentro muy grato, de distintas generaciones con el escritor, que anunció su retiro como novelista después de un recorrido literario significativo en Colombia y en Latinoamérica.
Ya estamos cerca del festival OIGA, MIRE LEA… uno de los festivales de Literatura más importantes del país, que gracias a la gestión de sus impulsoras y de Tamayo, es ahora una actividad regular y permanente de la Gobernación y que nació como una forma específica de realizar en la ciudad el equivalente al Hay de Cartagena.
En el mes de septiembre, ya se acerca, llegan a la ciudad escritores nacionales e internacionales para darnos a conocer sus obras y sus pensamientos.
Han pasado por “la capital de la salsa” figuras de la talla de Leonardo Padura, Jorge Volpi, Manuel Vilas, Cristina Rivera Garza, Juan Gabriel Vásquez, Piedad Bonnet… bajo la excelente coordinación literaria de Catalina Villa y en algunas ocasiones de José Zuleta. Quizás el Oiga, Mire Lea… tiene alguna deuda con escritoras mujeres de la dimensión de Rosa Montero, Isabel Allende o Laura Restrepo.
La fiesta de las letras se acompaña de muestras bibliográficas y recientemente se desarrolla un encuentro de librerías independientes y alternativas, que permite a los asistentes conoces ofertas novedosas en la ciudad.
La base de la Biblioteca es su muy completa colección de libros, revistas, periódicos y videos.
Igualmente sus actividades culturales y educativas cotidianas que se desarrollan a lo largo del año.
En los dos últimos años la Biblioteca ha reforzado sus programas en relación con la poesía, y la ciudad puede disfrutar de voces poéticas prácticamente todo el año por su trabajo en Biblio-Poesía: talleres, conversatorios, exposiciones y recitales. Igualmente se están ofreciendo talleres varios de escritura y lectura en diferentes géneros.
También se realizan en sus espacios exposiciones de pintura, escultura, fotografía y artes gráficas. Pasillos y salas están abiertas para que artistas de la región o del país presenten su trabajo a la apreciación de los vallecaucanos.
Me parece también muy importante resaltar todo lo realizado en la institución con los invidentes y jóvenes con incapacidad auditiva.
La Biblioteca posee una amplia colección de material en sistema braille y a través de su Sala Hellen Keller –abierta desde 1994– especializada y adecuada tecnológicamente, ofrece capacitación en lecto-escritura braille, en lengua de señas. Desde esta sala se acompaña a discapacitados y discapacitadas en sus viajes por la cultura y el arte.
La Biblioteca Departamental nos espera con sus varias puertas abiertas para nuestra formación y nuestro disfrute, participemos de su vida.