Las republiquetas de los traquetos
La República de Colombia, tal como la concibieron Bolívar y Santander, avanza hacia su disolución.
El estado concebido dentro de la Constitución Nacional está siendo reemplazado por las Republiquetas de los Traquetos.
Lo que está sucediendo desde hace tres semanas en Guajira, Cesar, Magdalena, Sucre, Atlántico y Bolívar en donde el Ejército de los Traquetos que controla casi todas las llanuras costeñas ha dado la orden de que se cierren un poco más de 3.000 oficinas de Supergiros, tiene colapsada la economía pueblerina de esos territorios.
Quizás en Bogotá y en la Comandancia del Ejército y en la Dirección Nacional de la Policía tan inusual fenómeno no lo hayan percibido porque la izquierda nuestra dejó de ser sindicalista y defensora de los más necesitados y se tornó en garosa del presupuesto nacional y no deja que las fuerzas armadas cumplan su misión.
No se sabe en verdad qué pasa, pero el hecho está allí, consumado ante los ojos de esos millones de habitantes que han visto como el gobernante del Estado no les garantiza poder realizar transacciones como giros, pago de facturas y cobro de subsidios.
Los que mandan en estos territorios son los Traquetos y ellos dieron la orden porque remplazaron al estado.
En un 75 % de estos municipios no hay oficinas bancarias y sus comerciantes se han visto impedidos de hacer pagos a sus proveedores y como tal se están quedando sin mercancías en sus almacenes.
Muchas familias tampoco recibirán el fin de mes los subsidios que gira el estado.
Y los Traquetos, por supuesto, no asumen tal responsabilidad.
Ellos solo prohíben y asesinan al que no obedezca. Estamos en presencia del avance veloz de las Republiquetas de los Traquetos y como no se han dado cuenta ni en la Casa de Nariño, donde todo se escucha con Pegasus o sin él, la ola va creciendo y la traquetería ,que era un fenómeno cultural, se está volviendo una realidad política.