#SíntomasDeCastrochavismo

Iván Cancino

El profesor Rodrigo Uprimny decía que el gobierno Duque tenía cinco síntomas de Castrochavismo, pero lo que no destaca al atacar una vez más a este gobierno es que muchos de estos mal llamados síntomas han sido propios de gobiernos nacionales y locales de izquierda y derecha precisamente por la excesiva legislación contradictoria y decisiones de constitucionalidad que en vez de aclarar, oscurecen.

No se trata de seguir con espejo retrovisor sino de no permitir que se siga contando la historia de manera parcial, veamos, el primer síntoma es controlar poderes independientes como fiscalía, procuraduría y defensor, en el gobierno de Santos todos ellos también fueron elegidos por la influencia del entonces presidente y también fueron cercanos y ex funcionarios o cercanos a su presidencia.

Segundo, empapelar judicialmente a sus opositores, Duque no ha tenido ninguna influencia en procesos judiciales contra opositor alguno, Santos, por el contrario, con su fiscal inició y fortaleció los procesos contra Álvaro Uribe, Oscar Iván Zuluaga y otros, así que si alguien sabe sobre perseguir opositores es el jugador de póker y no nuestro actual mandatario.

Tercero, no dar garantías electorales, el registrador del gobierno de Santos si que fue controvertido y además aún no está del todo claro la contratación que le dio a Market Medios, empresa de Prieto, cuestionado y condenado por el tema de Odebrecht y si falta de garantías es lo que se quiere poner de presente no olvidemos el bochornoso espectáculo de escasez de tarjetones y la solución bastante dudosa de Galindo de permitir votar con fotocopias de tarjetones, eso si fue escasez de garantías electorales.

Cuarto, usar la contratación pública para favorecer a sus candidatos es un tema que lo relacionan con la suspensión de la ley de garantías, cosa que no es cierta porque la ley de garantías sigue, lo que se autoriza es un punto específico y que, aunque inoportuno, lo que hizo el Congreso y el gobierno quitando esa limitante es absolutamente coherente con la eliminación de la reelección presidencial.

Por último, la mordaza a la prensa, no olvidar que el fiscal Montealegre, santista, citaba permanentemente a periodistas a entrevistas y declaraciones, además de la persecución que realizó sobre Vicky Dávila.

A veces incluso las personas más capaces quieren escribir la historia solo de una manera y de un lado, si alguien puede ser cuestionado con los interrogantes del profesor Uprimny es Santos y no Duque y otros mandatarios locales.