Cali, diciembre 9 de 2025. Actualizado: lunes, diciembre 8, 2025 20:18

Las acusaciones sin pruebas del presidente ponen en riesgo la estabilidad democrática

La confianza electoral no puede ser un juego

La confianza electoral no puede ser un juego
martes 9 de diciembre, 2025

El país entra en una fase decisiva, restan pocos meses para las elecciones legislativas y seis para la primera vuelta presidencial, y en este momento el presidente Gustavo Petro insiste en lanzar afirmaciones que siembran dudas sobre el sistema electoral sin entregar una sola prueba.

Además, resulta paradójico que quien fue elegido representante a la Cámara, senador, alcalde de Bogotá y presidente de la República gracias a este mismo sistema ahora pretenda desacreditarlo.

Es una contradicción que debería encender alarmas en todos los sectores democráticos.

En Cali, el presidente afirmó que el Banco Interamericano de Desarrollo ordenó comprar con dólares las elecciones de 2026.

Más recientemente, aseguró en su cuenta de X que la Registraduría permite intervención de Estados Unidos en los software electorales. Ninguna de estas afirmaciones vino acompañada de evidencias.

En consecuencia, la incertidumbre crece y la pregunta se vuelve inevitable: ¿cuál es el interés del presidente en debilitar la confianza ciudadana en las elecciones?

Si el presidente tiene denuncias concretas, debe presentarlas con rigor, aportar pruebas y seguir los canales institucionales.

Además, su investidura exige responsabilidad y claridad en cada declaración pública; un mandatario no puede insinuar fraudes sin sustento, porque esas palabras afectan la estabilidad democrática y generan dudas donde antes no existían.

La pregunta de fondo no puede dejarse de lado: ¿está el presidente abonando el terreno para desconocer los resultados si estos no favorecen sus intereses políticos? Esa posibilidad debe ser analizada con seriedad.

El país necesita elecciones transparentes, verificables y confiables, con auditorías, supervisiones y veedurías que garanticen la legitimidad del proceso.

Además, necesita serenidad institucional y respeto por las reglas del juego democrático. La confianza electoral es un pilar de la República y no puede convertirse en un instrumento político del gobierno de turno.


La confianza electoral no puede ser un juego

Comments

ads_top
Powered by Sindyk Content
Arriba