El dinero de la mafia corrompe el proceso electoral
La mafía en campaña
Con cada vez más las advertencias sobre la infiltración del narcotráfico en la campaña política, la más reciente la hizo el propio presidente de la República, Iván Duque.
El dinero de la mafia corrompe el proceso electoral mediante la compra y el trasteo de votos, la compra de veedores y líderes políticos y lleva a los cargos de elección popular a personajes que pondrán la institucionalidad al servicio de la delincuencia.
En ese sentido, los problemas de violencia y seguridad que tiene el país podrían complicarse aún más si quienes deben orientar las políticas locales contra estos flagelos llegan para ser cómplices de los delincuentes.
Y ni qué decir del estímulo a la corrupción que produce el narcotráfico cuando se mezcla con política, pues cuando los dineros ilícitos permean la actividad pública estimulan la lógica perversa en la que todo tiene un precio.
El gran interrogante es qué se hará para evitar que el dinero de la mafia termine determinando quiénes manejarán alcaldías y gobernaciones y quiénes ocuparán curules en concejos y asambleas.
No puede ser que diferentes voces alerten sobre la presencia de la mafia en la campaña y el 27 de octubre los candidatos con financiación ilícita terminen elegidos.
El Valle del Cauca tiene altísimo riesgo de infiltración de dineros ilícitos, ya ha ocurrido en el pasado, al igual que en todo el suroccidente colombiano, por ser epicentro de la economía del narcotráfico.
Ojalá las alertas funcionen y las autoridades competentes actúen oportunamente para evitar que la ilegalidad se tome los cargos públicos a través de títeres.