Pintemos nuestra ciudad de orgullo
El éxito de los Juegos Mundiales es responsabilidad de todos.
El lanzamiento de la campaña Yo pinto de orgullo mi ciudad, liderada por la Unidad de Acción Vallecaucana, que busca preparar y engalanar a Cali para la realización de los Juegos Mundiales 2013, debe contar con el apoyo decidido de todos los caleños. Si bien a esta iniciativa ya se han sumado la Alcaldía, entidades públicas, empresas privadas y medios de comunicación, en mayor o menor escala todos los habitantes de la capital del Valle del Cauca tienen mucho que aportar a esta iniciativa, y deben hacerlo.
Los ciudadanos pueden aportar embelleciendo y limpiando sus fachadas, manteniendo una actitud cordial y de colaboración con las delegaciones y los turistas y, desde luego, cuidando los escenarios deportivos y las obras de enlucimiento que se realicen. Es lamentable ver cómo espacios públicos que fueron recuperados hace cinco años, con motivo de los Juegos Nacionales, hoy están llenos de graffitis, pues fueron rayados por personas a las que no les importa la imagen de la ciudad. En esta oportunidad los caleños deben asumir el compromiso de cuidar.
Los caleños deben dimensionar la importancia de los World Games y entender que todos son anfitriones y responsables de la imagen que se lleven de la ciudad las delegaciones y los turistas. Por fortuna, la gente de Cali es amable y cordial, y motivarla para que asuma como propia la responsabilidad de que los Juegos Mundiales salgan bien no será difícil.
Así como se diseñó esta campaña liderada por la Unidad de Acción Vallecaucana para preparar a la ciudad y a los caleños, es necesario pensar en algo similar en el ámbito nacional con dos objetivos: el primero, que en el resto del país tengan claro que Cali representa a toda Colombia en la organización de los Juegos Mundiales, y, segundo, atraer a turistas de otras ciudades para que vengan a la capital del Valle entre el 25 de julio y el 4 de agosto a disfrutar de este certamen deportivo.
Estos juegos constituyen la oportunidad más grande que ha tenido Cali en su historia de mostrarse al mundo de manera positiva, y como tal debe aprovecharse.