El empréstito solicitado por el gobierno caleño es una oportunidad para darle un vuelco positivo a la ciudad.
Una apuesta por la transformación social y urbana de Cali
La solicitud de un empréstito por 3,5 billones de pesos presentada por el alcalde Alejandro Eder al Concejo de Cali no es solo una propuesta financiera, es una apuesta ambiciosa por el desarrollo integral de la ciudad.
Este financiamiento es clave para poner en marcha un paquete de 32 proyectos estratégicos que buscan mejorar tanto la infraestructura urbana como la calidad de vida de los caleños, especialmente de aquellos en situación de vulnerabilidad.
Entre las inversiones más destacadas, el empréstito incluye recursos para la recuperación de la malla vial, proyectos de movilidad y la creación de espacios públicos que fomenten la convivencia y la sostenibilidad.
Sin embargo, lo verdaderamente transformador de este plan es su enfoque social.
La propuesta también contempla 16.000 becas para educación formal y para el trabajo, así como el Ingreso Mínimo Garantizado para 15 mil familias en pobreza extrema, lo que impulsará la movilidad social y la estabilidad económica en Cali.
Además, se busca incluir a 6.000 jóvenes en programas de prevención de violencia y a 1.900 mujeres en el Sistema CuidArte, fortaleciendo el tejido social de la ciudad y promoviendo la inclusión.
El Concejo de Cali tiene en sus manos la posibilidad de aprobar una inversión que no solo modernizará la infraestructura de la ciudad, sino que también creará oportunidades y apoyos esenciales para miles de caleños.
Este empréstito representa una inversión en el futuro de Cali, una oportunidad para construir una ciudad más equitativa, competitiva y preparada para los desafíos del mañana.
Aprobar esta propuesta significa apostar por un desarrollo urbano que pone a las personas en el centro, integrando crecimiento económico, social y ambiental.