Ante nuevas emisiones de ceniza
Fortalecen monitoreo en volcán Puracé
Según el último reporte del Servicio Geológico Colombiano SGC, el volcán Puracé continúa en alerta naranja, tras registrarse un aumento significativo en la sismicidad, en la temperatura del cráter y en la emisión de gases y ceniza.
El reporte extraordinario señala que el sistema volcánico de la cadena de los Coconucos mantiene un comportamiento inestable que exige fortalecer las medidas de vigilancia y prevención en la zona.
Según el SGC, se mantiene el registro de sismos asociados al movimiento de fluidos dentro del edificio volcánico, entre ellos eventos de Largo Periodo LP, pulsos de tremor y tremor continuo.
Esta sismicidad, localizada principalmente bajo el cráter, está relacionada con el ascenso y la dinámica interna de los gases.
Adicionalmente, se detectaron señales sísmicas por fracturamiento de roca de baja magnitud, dentro de un radio de 1.5 kilómetros y con profundidades inferiores a tres kilómetros.
Varias de estas señales estuvieron acompañadas por emisiones de ceniza. En total, el SGC reportó cinco episodios recientes, en el que la columna alcanzó los mil metros sobre la cima del volcán y se dispersó hacia el suroriente debido a los vientos.
Estas emisiones activaron alertas dirigidas a la Aeronáutica Civil.
De manera paralela, continúa el registro de altos niveles de dióxido de azufre SO₂, detectados satelitalmente y transportados hasta 250 km hacia el nororiente.
Habitantes de la vereda Chapío reportaron fuertes olores a azufre, mientras que los sensores térmicos muestran un aumento de temperatura en la zona del cráter, asociado a la salida de gases calientes.
Vigilancia
Para reforzar la vigilancia, técnicos del SGC instalaron nuevos cenizómetros en Paletará, Coconuco y el casco urbano de Puracé.
Estos equipos permiten evaluar la cantidad y composición de la ceniza y detectar cambios tempranos en la actividad.
Las autoridades departamentales mantienen el alistamiento, han ordenado cierres temporales en áreas turísticas y reiteran el llamado a no acercarse al cráter.
El SGC recordó que, aunque pueden presentarse fluctuaciones en la actividad, el retorno a un estado estable (alerta amarilla) requiere tiempo y una evaluación sostenida de todos los parámetros monitoreados.