Ejecución de la guerra rusa en Ucrania ha demostrado enormes carencias

El conflicto entre Rusia y Ucrania se está desarrollando en un escenario de guerra clásica, que parecía impensable en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. Este 24 de junio se cumplen 120 días de dicha acción bélica en la que han muerto cerca de 4.200 civiles y han sido desplazadas casi 7 millones de personas.

En el programa Punto Crítico, de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL), el profesor Alfredo Antonio Rodríguez Gómez, de Ciencias Políticas en la Universidad Internacional de La Rioja (España), señaló que “esa es precisamente una de las lecciones cuatro meses después: la guerra clásica no está acabada, y al final puedes ‘combatir’ en el ciberespacio, pero para obtener réditos tienes que estar en el terreno y conquistarlo”.

“Además, si te encuentras con un enemigo menos preparado que tú, pero más decidido y que elige el terreno donde defenderse, el asunto no es tan sencillo, Vladimir Putin eligió el momento y el lugar para atacar, pero quienes conocen las zonas y saben cómo defenderse son los ucranianos”, agregó el académico español en conversación con el conductor del programa, Carlos Alberto Patiño, del Instituto de Estudios Político y Relaciones Internacionales de la UNAL.

Destaca además que “para derrotar a un enemigo que se defiende se necesita al menos el triple de las tropas instruidas, equipadas y entrenadas en el arte de la guerra”.

“Cuatro meses después, la ejecución de la guerra rusa no está a la altura de un Estado moderno que aspira a ser una potencia mundial, a pesar de sus ingentes inversiones en defensa en los últimos años, y al final su ejército tiene fallos”.

Según el experto, hace cuatro meses el escenario con respecto a este conflicto era incierto y el paso del tiempo profundiza la incertidumbre.

“Nadie sabe qué pasará, quizá el único que puede tener una idea de hacia dónde quiere llegar es Putin, que desde luego no es la idea que tenía cuando decidió invadir”.

“Aunque en un primer momento se esperaba que la ofensiva de Putin fuera aplastante, es decir que se tratara de una guerra relámpago y que las tropas aseguraran rápidamente el terreno conquistado, no ha sido tal”.

Para el académico, en este momento el escenario es de un fracaso de la ofensiva rusa en el que no se están realizando mayores novedades sobre los territorios que han tomado.

“Al parecer Putin parece mantenerse en el terreno conquistado hasta ahora, establecer y estabilizar un frente y ofrecerle a Volodímir Zelenski algún tipo de negociación”.

¿Se usarán armas nucleares?

En relación con el uso de armas nucleares, el profesor Rodríguez manifestó que “el arma nuclear ya se está usando, lo que pasa es que no ha explotado porque está siendo utilizada como estrategia disuasoria”.

“Esta es una de las razones que ha frenado las operaciones militares de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Hasta el momento, la OTAN y la Unión Europea han sabido unirse para hacerle frente a esta adversidad”.

“No se puede descartar que Putin llegue a utilizarla, en especial si siente que se queda sin salidas, pero el riesgo de que esto suceda es bajo”.

Para el académico, la guerra tiene reglas y está muy clara la división entre un civil y un militar.

Afirma que “la tendencia es que con el paso de los días la guerra vaya a más, porque, entre otras cosas, Putin tiene que, como mínimo, afianzar los territorios y demostrar que son suyos, por lo que cualquier intento de recuperación por parte de Ucrania será catastrófico”.

Además de las muertes y el desplazamiento de millones de personas, las acciones bélicas están teniendo importantes repercusiones en la economía mundial.

Según el Banco Mundial, este año la economía rusa caerá un 11,2%, las exportaciones un 30,9% y las importaciones un 35,2%. La inflación será de un 22%.

En Ucrania, el PIB en 2022 caerá un 45,1%, la exportación caerá un 80% y las importaciones un 70%, la inflación se disparará a un 15% y la deuda alcanzará un 90,7% del PIB.

Por Agencia de Noticias de la UNAL

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