Es una pérdida de consciencia, producto del cansancio
El microsueño puede llegar a ser fatal
Un microsueño es un corto lapso de tiempo (que dura entre 2 y 5 segundos, aproximadamente) en el que una persona sufre una pérdida de consciencia, producto del cansancio y la fatiga.
Lo que en el caso de los conductores, puede llegar a ser fatal, pues aunque momentánea, esta falta de atención hace que pierdan sus reflejos y la concentración al volante, poniendo en grave riesgo no solo su propia vida y la de sus acompañantes, sino también, la de todas las personas en los demás vehículos alrededor.
Expertos de Baterías MAC han elaborado esta corta guía para que cada conductor aprenda a prevenir el microsueño, con el fin de ayudarle a conservar y a conectar mejor su energía para que pueda conquistar sus metas todos los días:
Dormir bien antes de manejar: Es fundamental, especialmente antes de un viaje largo en carretera, que el conductor duerma, al menos, 8 horas diarias durante los dos días previos al viaje; ojalá en un buen colchón que favorezca el descanso, la comodidad, y sobre todo, que no interrumpa el sueño profundo.
Esto asegurará que el conductor esté plenamente descansado al tomar el volante.
Evite consumir cierto tipo de alimentos: Es habitual que muchos conductores, en aras de una mayor energía, decidan “comer bien” (es decir, en grandes cantidades) antes de manejar, con el objetivo de soportar la mayor cantidad de horas al volante. ¡Grave error! Pues según la Academia Americana de Medicina del Sueño, los alimentos con alto nivel de grasa y leche contienen una sustancia conocida como “aminoácido triptófano”, un propulsor de la serotonina, que es la neurotransmisora que induce al sueño.
Siestas cortas: Un estudio de la Fundación del Comisariado Europeo del Automóvil realizado en 2015, reveló que los microsueños son causantes del 24% de los accidentes mortales en las vías.
Una cifra que, incluso, podría ser mayor, pues el 59,22% de los conductores en Europa confesó haber experimentado esta clase de situación al menos una vez en su vida.
Se deben tomar siestas no mayores a los 20 minutos, especialmente durante largos trayectos, para que el conductor pueda tener un mejor ciclo de recuperación y así mantenga la concentración al volante.
Es importante que la siesta no supere el tiempo mencionado, pues la persona entraría a la etapa de sueño profundo, generando el efecto inverso, ya que al despertar, estaría aún más cansada y hasta de mal genio.
Pausas activas: Así mismo, es recomendable que el conductor no solo tome siestas cortas, sino que cada dos horas detenga el carro para que salga a caminar y estirar las piernas por aproximadamente 15 minutos, para que evite la somnolencia y otras afectaciones físicas.
Recuerde que si al manejar presenta los siguientes síntomas, es mejor que apague el vehículo y descanse un poco (ya sea mediante una pausa activa o una siesta corta) pues lo más seguro es que esté a punto de experimentar un microsueño. Los síntomas son: cabeceo, motricidad lenta, visión desenfocada, respiración lenta y bostezos.
Cuidado con la temperatura: El clima cálido, por lo general, suele precipitar la somnolencia, y por ende, el sueño. Por eso, es aconsejable hacer uso del aire acondicionado, o dado el caso, bajar las ventanas para que la brisa circule al interior del vehículo y lo mantenga fresco.