Hacia una transformación digital con derechos: la hoja de ruta desde Andicom
Rosa María Agudelo – Directora Diario Occidente
En un momento histórico donde la inteligencia artificial, la conectividad masiva y los datos están reconfigurando el mundo, América Latina se enfrenta a una pregunta crucial: ¿Cómo garantizar que la transformación digital sea ética, inclusiva y centrada en las personas?
Durante el Congreso Andicom 2025, uno de los principales encuentros tecnológicos de la región, se presentó una propuesta interesante: la transformación digital debe construirse desde los derechos humanos.
No se trata solo de infraestructura o innovación, sino de definir colectivamente el rumbo de un nuevo contrato social digital.
La Carta de Derechos Digitales: un punto de partida
Impulsada por el Gobierno de España y la entidad pública Red.es, la Carta de Derechos Digitales es una guía de referencia para gobiernos, empresas e instituciones.
Su objetivo es claro: garantizar una digitalización que ponga a las personas en el centro.
Los derechos se agrupan en seis grandes áreas:
- Libertad: Identidad digital, protección de datos, seudonimato, ciberseguridad.
- Igualdad: Acceso universal, no discriminación, accesibilidad.
- Participación: Libertad de expresión digital, acceso a la información pública, participación democrática.
- Entorno laboral y empresarial: Protección en el trabajo digital, transparencia algorítmica.
- Entornos específicos: Derechos reforzados en educación, salud y para niños, niñas y adolescentes.
- Garantías de cumplimiento: Supervisión efectiva, reparación, justicia digital.
¿Tus derechos digitales también cuentan? Esa fue una de las preguntas que abrió el diálogo.
Una brújula ética para no perdernos
Desde Fundación Telefónica, se enfatizó que la transformación digital “debe estar dirigida con valores”. No basta con innovar: hay que saber para qué y para quién.
“Vivimos una digitalización acelerada que puede arrollarnos. Por eso es urgente que sociedad e instituciones la dirijamos hacia el bien común”, señaló Pablo Gonzalo, responsable global de pensamiento crítico e innovación cultural.
El modelo propuesto es inclusivo, colaborativo y orientado a derechos, y toma como referentes tanto la Carta española como la Carta Iberoamericana de Derechos Digitales (2013).
Tecnología como ciudadanía
Para Juan Miguel Márquez, director de Red.es, la tecnología ha dejado de ser solo económica o sectorial: “Por primera vez tenemos una tecnología que está diluyendo todas las fronteras. La tecnología se ha convertido en ciudadanía.”
Esto implica una responsabilidad política y social: la regulación no puede seguir siendo marginal o técnica. Debe ser transversal, compartida y con visión ética.
La mirada de UNESCO: regulación con propósito
María Elena Estavillo, experta en ética digital y vocera de UNESCO, hizo un llamado a “volver a lo alto”: “La infraestructura es esencial, pero solo si está al servicio de los derechos. Para eso, la regulación es el paso número uno.”
Subrayó la necesidad de una colaboración internacional activa, tomando en cuenta el camino recorrido por Europa, pero sin perder la perspectiva y los retos propios de América Latina.
Gobernar la tecnología… pero ¿para qué?
Maryleana Méndez, secretaria general de ASIET, aportó una reflexión que refleja el momento que vivimos en torno a la tecnología. “Queremos gobernar la tecnología, pero si no sabemos qué queremos, ¿qué vamos a gobernar?”
La discusión concluyó con una idea central: la privacidad, la equidad, el acceso y la protección de datos no deben competir entre sí, sino articularse para reducir brechas.
Porque no se trata solo de conectar, sino de garantizar condiciones dignas para ejercer una ciudadanía digital plena.
Mi conclusión: derechos sí, pero también deberes
Aunque el panel de Andicom se centró en los derechos digitales, quiero cerrar con una reflexión personal: no concibo derechos sin deberes.
Como usuarios, como ciudadanos digitales, tenemos el deber de proteger nuestra información, participar con criterio y usar la tecnología con propósito.
Si la inteligencia artificial aprende de nosotros, entonces también depende de nosotros construir una cultura digital más ética, segura y humana.
1. Infórmate
Conoce tus derechos digitales.
Entiende cómo funciona la tecnología que usas.
2. Protege tus datos
Cuida tu privacidad y la de otros.
Revisa siempre qué estás compartiendo.
3. Usa la tecnología con ética
Piensa antes de publicar.
Participa con respeto y criterio.
4. Entrena la IA con responsabilidad
Tus acciones enseñan a la inteligencia artificial.
Sé claro, justo y consciente al interactuar con ella.
5. Crea y comparte con transparencia
Si usas IA generativa, dilo.
No presentes como propio lo que fue generado por una máquina.
En Andicom quedó claro: la transformación digital no es solo tecnológica.
Es profundamente política, social y humana.
Y solo será sostenible si se construye con enfoque de derechos.
Este contenido fue producido a partir de reportería original, con apoyo de herramientas de inteligencia artificial para su edición y estructuración.