¿Solución rápida o problema a largo plazo?
Advierten peligro sobre medicina “milagrosa” para adelgazar popular entre los famosos
En los últimos años, Ozempic, cuyo principio activo es la semaglutida, ganó notoriedad entre las celebridades de Hollywood como una solución rápida para la pérdida de peso.
Originalmente diseñado para tratar la diabetes tipo 2, este medicamento ayuda a regular el azúcar en sangre imitando una hormona que ralentiza la digestión y reduce el apetito.
Sin embargo, su uso con fines estéticos generó preocupaciones debido a los posibles efectos secundarios y la falta de estudios sobre su seguridad a largo plazo en personas sanas.
Efectos secundarios graves asociados al uso de Ozempic
El uso de Ozempic puede provocar efectos secundarios significativos.
Entre los más comunes se encuentran náuseas, vómitos, diarrea y dolor abdominal.
Estos síntomas suelen disminuir con el tiempo a medida que el cuerpo se adapta al medicamento.
Sin embargo, en personas con problemas renales, estos síntomas pueden agravar la condición, especialmente si causan deshidratación.
Además, se reportaron casos de pancreatitis, una inflamación del páncreas que puede ser potencialmente mortal.
Aunque la relación directa entre Ozempic y la pancreatitis aún está en estudio, es esencial que los usuarios estén atentos a síntomas como dolor abdominal intenso y persistente.
Otro riesgo identificado es el posible desarrollo de tumores en las células C de la tiroides, lo que podría derivar en cáncer medular de tiroides.
Aunque este efecto se ha observado principalmente en estudios con roedores, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) ha emitido advertencias al respecto.
Dependencia y efecto rebote al suspender Ozempic
Un aspecto preocupante del uso de Ozempic para la pérdida de peso es la posibilidad de recuperar el peso perdido al suspender el tratamiento.
Estudios indican que, al dejar de usar el medicamento, muchos usuarios no solo recuperan el peso perdido, sino que pueden ganar más.
Esto sugiere una dependencia del fármaco para mantener la pérdida de peso, lo que plantea interrogantes sobre su eficacia a largo plazo.
Además, la rápida pérdida de peso inducida por Ozempic puede conducir a la flacidez de la piel y a la caída del cabello.
La razón: cuanto más rápida es la pérdida de peso y mayor es el déficit calórico, más comienza el cuerpo a desregular sistemas que no son esenciales para la supervivencia.
Falta de estudios sobre los efectos a largo plazo en personas sanas
Aunque Ozempic demostró ser efectivo en el control de la diabetes tipo 2 y en la pérdida de peso en personas con obesidad, su uso en individuos sanos sin estas condiciones carece de suficiente investigación.
La aprobación relativamente reciente de este medicamento significa que los investigadores aún no saben cuáles son los efectos de tomarlos a largo plazo.
Expertos en trastornos alimentarios también advierten que los supresores del hambre, como la semaglutida, pueden desencadenar o empeorar estos trastornos, los cuales no se resuelven únicamente con la pérdida o el aumento de peso.
Además, la comunidad médica aún desconoce los efectos a largo plazo de Ozempic cuando se utilizan específicamente para la pérdida de peso, ya que faltan estudios clínicos exhaustivos que evalúen su impacto en el cuerpo tras años de uso.
Aunque Ozempic ganó popularidad como una solución rápida para la pérdida de peso, es fundamental que las personas consideren los posibles riesgos asociados con su uso, especialmente cuando no se padece de diabetes tipo 2.
La consulta con un profesional de la salud antes de iniciar cualquier tratamiento es esencial para garantizar la seguridad y eficacia del mismo.
Este artículo fue elaborado por un periodista del Diario Occidente usando herramientas de inteligencia artificial.