Libromanía
Los abismos
Por: Rafael Araújo Gámez
PILAR QUINTANA
Alfaguara.
246 páginas.
Uno de los grandes logros de Pilar Quintana es que cuenta sus historias con tal sencillez que el lector debe estar muy acucioso para capturar el fondo de lo que ese relato trae consigo.
En Los abismos, Premio Alfaguara 2021, está plasmada dicha apreciación ya que, a través de los ojos de Claudia, una niña de 8 años, nos introducimos en el desenvolvimiento vital de una familia clase media de Cali.
Pero cuando se adentra en la historia que se está leyendo, la mente y las pupilas de nuestros ojos se abren como el diafragma de una cámara y de inmediato nos metemos de lleno en un relato repleto de acontecimientos cotidianos que nos va perfilando el ambiente que se vive en esa familia y su entorno social.
Sin condicionamientos directos, lo que le restaría importancia literaria, sino con alusiones a los hechos comunes y corrientes que deben vivir ella y sus padres, la escritora nos muestra un círculo doméstico y de amistades en donde salen a flote sus vivencias todas ellas plagadas de las certezas e inquietudes que los seres humanos creamos en nuestro diario devenir.
En líneas generales la vida de Claudia transcurre con alguna normalidad, pero de improviso, un hecho particular viene a cambiarle el panorama que frente a sus ojos de niña observa el de los mayores. Sobre todo, el de sus padres.
Ese hecho, sumado a los que ella va percibiendo, hacen que su formación se enriquezca con una intuición que la lleva a contemplar los acontecimientos con perfecto conocimiento de sus causas y efectos.
Eso conlleva a que logre captar los grandes abismos que las relaciones interpersonales de los seres que la rodean vayan surgiendo de una manera sorpresiva que, a pesar de esta circunstancia, Claudia asimila hasta cierto punto con algunas preguntas recibiendo respuestas evasivas por parte de sus mayores.
Una de las virtudes de la novela es que Pilar Quintana elabora un lenguaje sencillo, directo y sin ditirambos que nos hace ver con claridad, aunque de una manera inquietante, a través del relato de la niña lo que va sucediendo a su alrededor.
No va más allá. No se adentra en disquisiciones filosóficas que podrían haber afectado su lectura esto hace que sea una novela para recrearse en ella sin inventarse ningún abismo que pueda soslayar todo lo que esa niña vive y nos cuenta. Vivámoslo con ella.