Un impresionante escudo de defensa aérea
Vea cómo funciona la “Cúpula de Hierro”, el sistema antimisiles que protege a Israel de ataques
En los últimos días, Israel ha sido blanco de ataques con cohetes, generando la activación de uno de los sistemas de defensa aérea más avanzados del mundo: la “Cúpula de Hierro” o Iron Dome.
Este sistema es clave para la protección de zonas civiles en el país, ya que está diseñado específicamente para interceptar y destruir misiles y proyectiles antes de que alcancen su objetivo.
La “Cúpula de Hierro” es un sistema de defensa antimisiles desarrollado por Israel para contrarrestar ataques con cohetes y morteros.
Fue diseñado con un único propósito: proteger a la población y a infraestructuras críticas de ataques provenientes de grupos armados, como Hamás y Hezbollah, quienes suelen lanzar proyectiles desde la Franja de Gaza o el Líbano.
Este sistema se ha convertido en una pieza fundamental de la seguridad nacional israelí desde su implementación en 2011, logrando interceptar miles de cohetes que de otro modo habrían causado daños considerables en áreas urbanas densamente pobladas.
¿Cómo funciona la “Cúpula de Hierro”?
El funcionamiento de la “Cúpula de Hierro” se basa en un conjunto de radares, sistemas de control y misiles interceptores que trabajan en conjunto para detener los proyectiles enemigos en pleno vuelo.
1. Detección del ataque: Todo comienza con un radar avanzado que monitorea el espacio aéreo de Israel en tiempo real.
Este radar es capaz de detectar el lanzamiento de un cohete o proyectil desde el momento en que sale disparado.
Una vez detectado, el radar calcula la trayectoria del misil y determina hacia dónde se dirige.
2. Análisis de la amenaza: En cuestión de segundos, un sistema de control de batalla analiza si el proyectil detectado representa una amenaza.
Si el cohete está en curso hacia una zona habitada o una infraestructura crítica, el sistema decide que es necesario interceptarlo.
Si el cohete está destinado a caer en áreas deshabitadas, la “Cúpula de Hierro” puede optar por no activarse, lo que ayuda a reducir costos.
3. Intercepción: Cuando se decide que el cohete debe ser destruido, se lanza un interceptor desde una de las baterías de la “Cúpula de Hierro”.
Este misil interceptador está diseñado para alcanzar al proyectil en pleno vuelo y destruirlo antes de que llegue al suelo.
Generalmente, la intercepción ocurre a una altura considerable para que, incluso si los restos caen, el impacto en el terreno sea mínimo.
4. Destrucción en el aire: El interceptor impacta directamente sobre el cohete enemigo, provocando su destrucción en el aire. Este proceso se lleva a cabo en cuestión de segundos, lo que hace que la respuesta sea rápida y eficiente.
Eficacia y limitaciones
La “Cúpula de Hierro” tiene una tasa de éxito muy alta, con estimaciones que oscilan entre el 85% y el 90% de los cohetes interceptados.
Sin embargo, no es infalible. El sistema está diseñado para proteger áreas específicas y, en ocasiones, algunos proyectiles logran atravesar la red de defensa, especialmente cuando los ataques son masivos y coordinados.
Además, la “Cúpula de Hierro” tiene un alto costo operativo.
Cada interceptor lanzado cuesta entre 40.000 y 100.000 dólares, lo que puede generar un impacto financiero significativo en enfrentamientos prolongados.
Un escudo vital para Israel
A pesar de sus costos y limitaciones, la “Cúpula de Hierro” ha salvado innumerables vidas en Israel.
Su capacidad para interceptar cohetes en pleno vuelo y proteger a la población civil lo convierte en uno de los sistemas de defensa más efectivos del mundo.
Mientras continúan los ataques en la región, la “Cúpula de Hierro” sigue siendo una pieza clave para mantener la seguridad en el país y minimizar los daños en momentos de conflicto.