Desarticulación de bandas y creación de oportunidades
Política de seguridad en Cali: Expertos analizan desafíos
En una sesión reciente del Concejo de Cali, se discutió la urgencia de implementar una Política Pública de Seguridad y Convivencia robusta y perdurable para los próximos 10 años.
Expertos como Jaime Ernesto Palma de la Oficina de las Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito y Carlos Augusto Chacón del Instituto de Ciencia Política Hernán Echavarría Olózaga, fueron convocados para analizar la situación de seguridad en la ciudad durante los últimos cinco años.
Uno de los puntos destacados fue la presencia de 182 grupos delincuenciales operando en Cali desde 2019, involucrados en diversas actividades ilegales como narcotráfico, extorsión, y hurto.
Estos grupos se concentran principalmente en áreas críticas como el oriente, la galería de Santa Elena y las comunas 3, 9 y 10 en la zona urbana, así como en los corregimientos de Pichindé y La Leonera en la zona rural, donde la minería ilegal aumentó los problemas de seguridad.
Según Jaime Ernesto Palma, los índices de homicidios, disputas territoriales y otros delitos aumentaron, con un índice de homicidios de 44.4 por cada 100.000 habitantes en comparación con el promedio nacional de 7.1%.
El uso de armas de fuego es predominante en el 80% de los casos, exacerbando aún más la situación de violencia en la ciudad.
Además de la violencia delictiva, la ciudad enfrenta desafíos como la violencia intrafamiliar, con una relación de 4 casos por cada mujer víctima, en comparación con 1 caso por hombre, principalmente por delitos sexuales.
Este contexto contribuyó a una percepción de inseguridad que alcanza el 84.1% entre los ciudadanos.
Problemáticas desde una perspectiva integral
Carlos Augusto Chacón enfatizó la necesidad de abordar estas problemáticas desde una perspectiva integral que incluya no solo la represión del crimen organizado, sino también la generación de oportunidades económicas legítimas para los jóvenes y la formalización de la economía informal, como estrategias clave para desarticular las estructuras criminales.
En respuesta a estas preocupaciones, se planteó la importancia de una alianza interinstitucional efectiva que integre a la administración de justicia y la participación activa de la comunidad.
Según los expertos, esto no solo fortalecerá la confianza ciudadana en las instituciones, sino que también facilitará la denuncia de actividades ilícitas y la implementación de soluciones efectivas en el terreno.
La implementación de tecnologías de vigilancia y monitoreo también fue mencionada como una herramienta crucial para mejorar la seguridad en áreas críticas como El Calvario y mitigar la proliferación de asentamientos ilegales en la ladera y el oriente de la ciudad.
En términos económicos, Cali enfrenta desafíos significativos, con una alta tasa de economía informal que alcanza el 47.5%, la más alta del país.
Esto facilitó la expansión de actividades ilegales como el préstamo informal conocido como “gota a gota”, que explota la exclusión financiera de muchos ciudadanos y contribuye a perpetuar el ciclo de la criminalidad.
Para abordar estos problemas estructurales, los concejales subrayan la importancia de implementar políticas públicas que no solo se enfoquen en la represión del delito, sino también en la promoción de oportunidades económicas inclusivas y el fortalecimiento de la red de seguridad social.
Este enfoque integral, según los expertos, es fundamental para alcanzar resultados sostenibles y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos en Cali.