Denuncian a Patarroyo por maltrato animal

Por considerar que el científico colombiano Manuel Elkin Patarroyo realiza presuntamente experimentos ilegales con primates, la senadora del Partido Verde, Andrea Padilla, instauró una demanda contra el médico.

Según indicó la senadora Andrea Padilla, el científico colombiano es responsable de maltrato animal, tráfico y caza ilegal de animales silvestres.

Como se recordará, Patarroyo ha sido reconocido internacionalmente por sus investigaciones en torno a la búsqueda de la vacuna contra la malaria.

40 años

La senadora afirmó que esta es una historia que se remonta a 1984, cuando Manuel Elkin Patarroyo obtuvo el primer permiso para experimentar en primates lo que sería una vacuna sintética para la malaria.

La congresista afirmó que “son casi cuarenta años de capturas ilegales, denuncias por tráfico ilegal de animales silvestres, incluso transfronterizo, liberaciones de animales con virus inoculados… Ese señor lleva felizmente experimentando en más de 7.400 primates una vacuna que, pues no sale a la luz”.

Así mismo, afirmó que en Colombia es posible esta experimentación biomédica, pero está trabajando en un proyecto de Ley para actualizar la normatividad, ya que la existente es anterior a la Constitución de 1991.

“Está llevando a cabo los delitos más graves como el tráfico fronterizo, particularmente con Perú y libraciones que rompen todas las normas establecidas por organismos internacionales”, afirmó Padilla.

La dirigente del Partido Alianza Verde indicó que en la denuncia está adjuntando lo que llamó un “arsenal probatorio enorme”, que comprende documentos, certificación y además, solicitó el testimonio de doce personas que incluyen extrabajadores de la Fundación Instituto de Inmunología de Colombia Fidic, de la seccional de amazona, ICA y de indígenas que han hecho capturas de estas especies.

Denuncia irregularidades

En un informe divulgado por la Alianza Verde, la senadora Andrea Padilla manifiesta que “ casi 40 años después no hay resultados ciertos sobre la vacuna; en cambio, sí, un centenar de irregularidades en los procesos de adquisición, captura, uso y liberación de animales. Han sido 40 años de incumplimiento de normas; de renuencia a crear el comité de ética que ordena la ley para controlar excesos y malos tratos a los animales; de abusar de animales sin restricciones; de renovar permisos para capturar animales, y de procesos sancionatorios sin resultados, con la complicidad y laxitud del desaparecido Inderena y Corpoamazonía”.

Según la senadora y activista por los derechos de los animales , “los hechos son tan graves y las evidencias tan contundentes que no se explica cómo no hay sanciones penales”.

Los documentos

Entre los hechos que se documentan en la denuncia hecha por Andrea Padilla, están los siguientes:

Según la senadora, Fidic jamás contó con el permiso del Ministerio de Salud ni conformó el comité de ética que exige el artículo 23 de la Ley 84 de 1989, para experimentar en animales; más aún, tratándose de primates.

Así mismo, destaca que se han abierto cuatro procesos de investigación sancionatoria contra la Fidic por incumplir permisos otorgados por Corpoamazonía: el primero, en 2002, por capturar primates de la especie Aotus nancymaae, que no estaba autorizada (se desconoce el avance o resultado de la investigación de este proceso).

La congresista indicó que el segundo proceso es en 2010, por exceder la cuota anual de capturas permitida se decomisaron 60 primates y a la imposición de una multa.

El tercer proceso inició en 2011, cuando Ángela Maldonado, directora de la Fundación Entrópica, denunció el tráfico ilegal de monos de especie Aotus nancymaae que estaba realizando la Fidic.

Sin embargo, explica, al igual que el proceso anterior, que tardó ocho años en fallarse, este lleva más de diez años sin resolverse.

El cuarto proceso fue iniciado en 2021 por el incumplimiento de las obligaciones derivadas de una Resolución de 2020.

Más pruebas

También anexó un documento en el que indica que en 2010, Corpoamazonía accedió a la solicitud de la Fidic de incluir la especie Aotus nancymaae en el permiso de captura, pese a estar incursa en un proceso de investigación disciplinaria.

Este permiso, que hoy es objeto de investigación de la Contraloría y la Procuraduría, se dio haciendo caso omiso a las recomendaciones del Convenio de Cooperación Científica y Tecnológica y el Instituto Von Humboldt, que alertaron sobre el peligro de extinción en el que se encuentra la especie.

Según se registra en las actas de liberación, se han liberado primates con virus inoculados, en grupos que oscilan entre 18 y 146 individuos por día, y sin estudios previos, lo que pone en grave riesgo a la especie y el equilibrio ecológico.

En 2020, Corpoamazonía evidenció que la Fidic llevaba un año haciendo capturas, experimentaciones y liberaciones de animales en pésimas condiciones físicas, sin contar con el comité de ética y sin personal veterinario.

La autoridad ambiental les notificó a las autoridades departamentales que la Fidic no tenía autorización para movilizar animales, lo que hace pensar que estaba ocurriendo.

En 2021, Corpoamazonía le ordenó a la Fidic suspender actividades por no contar con biólogos ni veterinarios.

Además, aprehendió a los animales de la estación experimental y dejó a la Fidic como responsable de su manutención. Sin embargo, no se sabe qué pasó con estos animales.

En 2023, personal de la Fidic les inoculó a 119 primates el virus del covid -19, sin tener autorización para ello.

En el mismo año, Corpoamazonía registró la fuga de 17 individuos y la muerte de 46. La denuncia contiene más de 50 anexos y en ella pide recibir testimonio de 12 personas, entre ex trabajadores de la Fidic y funcionarios de Corpoamazonía.

Además, Andrea Padilla solicitó compulsar copias a la Procuraduría y a la Contraloría para que se investigue al Ministerio de Ambiente y a Corpoamazonía por la posible comisión de faltas disciplinarias que favorecieron conductas de maltrato animal y daños a los recursos naturales por parte de la Fidic.

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