Colombia rechaza atentado a Miguel Uribe Turbay

El atentado contra el senador y precandidato presidencial por el Centro Democrático, Miguel Uribe Turbay generó una ola de rechazo tanto de la comunidad, como dirigentes y gremios y asociaciones a nivel nacional.

El dirigente político permanece en estado crítico y en cuidados intensivos luego de una cirugía a la que fue sometido, en la Fundación Santa Fé tras el atentado sufrido este sábado mientras participaba de una reunión en Bogotá.

En Cali, la acción criminal también generó reacciones en su contra.

A través de las redes sociales, el alcalde de Cali, Alejandro Eder, calificó el día como “oscuro para Colombia” y pidió al Gobierno nacional actuar con contundencia contra los responsables.

“No más llamados al odio. El gobierno nacional debe actuar con contundencia contra los asesinos”, expresó el mandatario local, sumándose a los llamados de solidaridad y defensa de la democracia.

Por otra parte, la Plazoleta Jairo Varela fue escenario este domingo de una multitudinaria velatón en solidaridad con Uribe Turbay.

Al evento acudieron representantes de la sociedad civil, líderes comunitarios, empresarios y dirigentes gremiales, quienes manifestaron su respaldo a la familia Uribe y su rechazo a la violencia política.

Durante la jornada, los asistentes hicieron un llamado urgente a frenar el lenguaje de odio y a garantizar condiciones de seguridad y transparencia en el proceso electoral que se avecina.

El acto transcurrió en calma y reflejó el deseo colectivo de preservar la vida, el debate democrático y la convivencia pacífica en el país.

Más reacciones

María del Mar Palau, presidenta de la Cámara de Comercio de Cali, destacó el compromiso histórico de Miguel Uribe Turbay con la democracia y la búsqueda de un mejor futuro para Colombia.

“Desde muy temprana edad él ha sentido una profunda responsabilidad por su país, no sólo por la historia de su familia sino con sus valores y por su determinación para buscar un futuro mejor para todos”, afirmó Palau, quien participó en el encuentro por la paz organizado en el Valle del Cauca.

Asobancaria expresó en un comunicado su “más enérgico rechazo y profunda consternación”, advirtiendo que el ataque no solo atenta contra la vida de un líder político, sino que hiere los cimientos de la democracia.

El gremio hizo un llamado a rodear la vida, la paz y la institucionalidad, y a no permitir que el miedo sustituya al diálogo ni que el odio nuble la esperanza.

La coalición política Alma, por su parte, calificó el hecho como “cobarde” y propuso la necesidad de un gran acuerdo político nacional para superar la violencia.

“Las páginas de la historia de Colombia no pueden seguir siendo escritas registrando hechos de violencia de esta naturaleza. Es urgente un diálogo nacional”, señaló la coalición en su comunicado.

Desde el sector turístico, Anato advirtió sobre el impacto negativo de la violencia política en la imagen internacional del país y en sectores estratégicos como el turismo.

Paula Cortés Calle, presidenta ejecutiva de la asociación, exigió justicia pronta y transparente, y reiteró que la violencia política no puede tener espacio en una sociedad que busca el desarrollo y la confianza ciudadana.

La Cámara Colombiana de la Construcción, Camacol, también condenó el atentado y exigió garantías reales para el ejercicio democrático, subrayando que proteger la vida de quienes ejercen liderazgo político es un deber ineludible del Estado.

Protección, una prioridad

Luego de un consejo extraordinario de seguridad, el presidente Gustavo Petro condenó enérgicamente el atentado, calificándolo como “una acción que enluta a la democracia”.

Petro anunció la priorización de la protección de todos los líderes políticos de la oposición y aseguró que no se escatimarán recursos para dar con los responsables.

El mandatario informó que el presunto agresor fue capturado y que se investigarán posibles fallas en el esquema de seguridad de Uribe Turbay, reiterando que todas las hipótesis permanecen abiertas para no entorpecer la investigación.

Petro enfatizó que el Estado debe responder con unidad y sin revanchismo, y advirtió sobre la instrumentalización política del atentado.

“No es el momento de sembrar más odio, ni de aprovechar el dolor para hacer cálculos. El atentado contra Miguel Uribe es un atentado contra todos. Contra la democracia misma”, afirmó el presidente, quien además instruyó una revisión exhaustiva de los esquemas de seguridad de los miembros de la oposición.

El jefe de Estado concluyó enviando un mensaje de solidaridad a la familia y amigos de Miguel Uribe, y reiteró que la seguridad de los opositores será una prioridad, con la promesa de que no se repetirán los errores del pasado y que todas las capacidades del Estado están al servicio de la investigación.

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