Cali, junio 23 de 2025. Actualizado: domingo, junio 22, 2025 10:10
Empresario TEC
El consumo de energía por uso de IA aumentará 4,2 veces para 2028
Por Fernando Garzón @fergarzon
La inteligencia artificial (IA) es altamente utilizada en el mundo empresarial.
De acuerdo con una reciente encuesta de PwC, el 82% de los líderes empresariales afirma haber adoptado iniciativas de IA en sus organizaciones, aunque solo el 17% ha logrado implementarlas de manera efectiva.
Y es que el fenómeno no es menor: mientras que internet tardó siete años en alcanzar su primer millón de usuarios, herramientas como ChatGPT lo hicieron en apenas cinco días, según datos de Business Insider.
Sin embargo, este vertiginoso crecimiento viene acompañado de un desafío crucial: su consumo energético.
Se proyecta que para el 2028, el uso de la inteligencia artificial aumentará 4,2 veces la demanda energética global actual, debido al funcionamiento intensivo de los centros de datos que requieren grandes cantidades de energía para alimentar sus procesos de cómputo y enfriamiento.
A pesar de este panorama, la industria tecnológica y sectores aliados ya están trabajando en soluciones para que la IA no solo sea un motor de innovación, sino también una aliada en la transición hacia un modelo energético más sostenible.
“La inteligencia artificial resuelve problemas más grandes de los que genera”, afirma Javier Ortiz, CEO del Clúster Andino de Schneider Electric.
Según el directivo, estamos en un punto de inflexión donde el enfoque debe estar en desarrollar sistemas cada vez más eficientes y optimizar su uso para minimizar el impacto ambiental.
Entre los beneficios que ofrece la IA en este contexto se destacan la reducción de las emisiones de CO₂ y gases de efecto invernadero entre un 5% y un 10%; la optimización de la demanda energética; el monitoreo más preciso del uso de energía; y la reducción de pérdidas en la transmisión eléctrica.
Además, la capacidad de recolectar y analizar grandes volúmenes de datos —el 90% de los datos disponibles en el mundo se han generado en los últimos dos años— está permitiendo una toma de decisiones más informada en múltiples sectores.
A esto se suma el potencial económico de la inteligencia artificial generativa, que se estima puede aportar entre USD 2,6 y USD 4,4 trillones a la economía global, al transformar procesos en áreas como manufactura, servicios, salud, energía y educación.
En el caso colombiano, la adopción de IA ya muestra impactos positivos: aumento de la productividad en pymes y grandes empresas, cierre de brechas entre zonas rurales y urbanas mediante automatización y conectividad, desarrollo de talento local en tecnologías emergentes y una mejora en la innovación pública y la eficiencia del Estado.
La infraestructura digital del país creció un 15% en 2024, y subirse a esta ola tecnológica es cada vez más urgente para que las empresas sigan siendo competitivas.
Se debe encontrar un balance entre el avance acelerado de la IA y un consumo energético responsable.
Si se logra este equilibrio, no solo se potenciará la transformación de la industria, sino que se abrirá el camino hacia un futuro más sostenible y eficiente.