Cali, mayo 18 de 2024. Actualizado: viernes, mayo 17, 2024 23:42
Caleños y paisas
Recientemente, expresé mi admiración por los antioqueños.
Me impresionó la solidaridad, el arraigo y la unión que los paisas demuestran al enfrentar desafíos comunes, como el caso de las obras de infraestructura que motivaron la “vaca”.
Después de escribir esa nota, me surgió la pregunta: ¿Por qué algunas sociedades son más solidarias y unidas que otras? Incluso peor, ¿por qué hay comunidades donde prevalece el individualismo, la envidia y el mantra del “sálvese quien pueda”?
En Cali, algunos sugieren que se practica el “calibanismo”, término que intenta describirnos combinando el nombre de nuestra ciudad con la palabra “canibalismo”, haciendo alusión a una costumbre atroz y salvaje.
Sin pretender ser un sociólogo, intentaré ofrecer algunas hipótesis para explicar este contraste.
Creo que gran parte de la diferencia se debe a los valores culturales. Valores relacionados con la importancia de tener instituciones sólidas como la familia, la comunidad e incluso el gobierno local; valores que son fundamentales para fomentar la cooperación y la solidaridad.
Estoy convencido de que en las familias y comunidades donde se promueve el cuidado mutuo y la colaboración entre sus miembros, hay una mayor cohesión y solidaridad que en aquellas donde no se fomentan estos valores.
Por supuesto, aspectos psicológicos también juegan un papel importante. La empatía, la identidad grupal y la confianza, por ejemplo, son fundamentales. La capacidad de ponerse en los zapatos del otro y comprender sus necesidades fomenta la solidaridad y la cooperación.
Asimismo, una identificación sólida con el grupo y la confianza en sus miembros ayudan a crear un sentido de pertenencia y el deseo de colaborar.
Queridos paisanos caleños: ¡Tenemos mucho qué mejorar!