Innovar para sobrevivir

Rosa María Agudelo

La nominación del Diario Occidente a los premios de transformación digital en Andicom 2025 me llena de orgullo.

No se trata solo de un reconocimiento a un periódico. Es la validación de un camino recorrido con valentía en medio de la incertidumbre.

Hace veinticinco años, cuando la palabra innovación apenas se asociaba con tecnología, Occidente tomó decisiones arriesgadas.

Fue el primer diario gratuito del país, cambió de formato a tabloide, se atrevió a romper moldes. Más allá de eso, entendió que la tecnología no era un accesorio sino una palanca de desarrollo.

Apostar por el dato, por programas de innovación y, más recientemente, por la inteligencia artificial no fue moda, fue visión y estrategia de largo plazo.

Ese esfuerzo demuestra que no se necesita ser una “startup” para ser modernos. La clave está en la mentalidad, no en la edad de la empresa ni en la naturaleza del negocio.

Mientras otros medios se quedaron anclados en la nostalgia del papel, Occidente decidió pensar y actuar como lo exige el futuro.

Por eso hoy, en plena cuarta revolución industrial, se le reconoce como un referente de adaptación y transformación.

El mensaje es motivador para todas las organizaciones: innovar no es opcional. La resistencia al cambio solo acelera la obsolescencia.

La innovación no garantiza éxito inmediato, pero sí asegura la vigencia en un entorno competitivo y cambiante.

Celebrar esta nominación es celebrar también la perseverancia. Recordar que las transformaciones empresariales no se logran en un año ni con una moda pasajera.

Requieren consistencia, riesgo y coherencia. El Diario Occidente lo entendió y por eso hoy inspira a otros. Porque innovar no es gastar recursos en novedades, es asegurar el futuro de quienes creen en lo que hacen.

Los accionistas, los colaboradores, los aliados, los clientes, todos asumiendo los retos de ser distintos antes de que lo nuevo sea normal.