Una empresaria al mando

Esta semana tuve la oportunidad de escuchar en dos ocasiones a María del Mar Palau, nueva directora de la Cámara de Comercio de Cali. Su nombramiento es un hito no solo por ser la primera mujer en ocupar el cargo, sino porque es la primera empresaria en hacerlo.

Palau representa una visión empresarial moderna. Una que entiende que las empresas no son solo generadoras de empleo o riqueza, sino motores de transformación social. En sus intervenciones recalca que el Valle necesita una nueva narrativa, una en la que empresarios, ciudadanos y gobierno se reconozcan como aliados y no como adversarios.

Esta visión cobra especial valor en un país marcado por la polarización. En donde el diálogo entre el sector público y privado ha estado lleno de recriminaciones y desconfianza. En ese sentido que su elección haya sido producto de un proceso meritocrático es una buena señal medio del ruido.

María del Mar tiene el desafío de construir puentes. De tender canales de diálogo entre un gobierno con tensiones ideológicas hacia el empresariado y un sector productivo que necesita reglas claras, pero también sensibilidad social. Su experiencia, su liderazgo y su talante la convierten en una figura capaz de liderar esa conversación.

Cali y el Valle necesitan de liderazgos que crean en el trabajo conjunto. Que no alimenten los extremos sino que generen consensos. La Cámara de Comercio, bajo esta nueva dirección, tiene la oportunidad de ser un catalizador de confianza. El crecimiento empresarial, la educación y la tecnología serán pilares fundamentales de su gestión hacia un desarrollo más equitativo e inclusivo. Y eso, en este momento del país, es tan valioso como necesario.

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