Del matoneo y las amenazas a la oposición

El matoneo en las redes sociales contra aquellos que expresan opiniones contrarias al gobierno del presidente Gustavo Petro es un acto que debe ser condenado enérgicamente. El caso reciente de la senadora Norma Hurtado, quien ha sido objeto de intimidaciones y acoso debido a su posición respecto a la reforma a la salud, es solo un ejemplo preocupante de esta tendencia alarmante.

Es inaceptable que en una democracia los líderes políticos que contradicen al gobierno con argumentos sean sometidos a amenazas y agresiones por el simple hecho de expresar posiciones contrarias. La diversidad de ideas y la libre expresión son pilares fundamentales de cualquier sociedad democrática, y atacar a aquellos que discrepan de las políticas gubernamentales es un atentado directo contra estos principios.

Si bien el presidente Gustavo Petro rechazó públicamente las amenazas contra la senadora Hurtado y afirmó que en su gobierno no se persigue a la oposición, sus propias palabras contribuyen a crear un clima de polarización y confrontación. Hace pocos días el mandatario tildó de paramilitares a quienes se oponen a su propuesta de una asamblea constituyente, hecho irresponsable que estigmatiza e incita al odio y a la violencia.

Es fundamental que en Colombia se promueva el respeto por la pluralidad de opiniones y se fomente el debate constructivo en lugar de la confrontación y la intimidación, y el presidente de la República debe guiar con el ejemplo.

Los congresistas que tienen la valentía de defender sus posiciones deben ser respaldados y protegidos por la ciudadanía, ya que representan la diversidad de ideas que enriquece el proceso democrático.

La verdadera paz y estabilidad de nuestro país dependen del respeto mutuo, la tolerancia y el diálogo entre todos los sectores de la sociedad. Instamos a todos los ciudadanos, independientemente de sus filiaciones políticas.

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