Buscan revivir la lucha de clases y generar rabia y odio: Velasco

Mauricio Ríos Giraldo

El exsenador Gabriel Velasco, asesor del alcalde Alejandro Eder en asuntos políticos, aseguró –a través de la red social X, antes Twitter– que “se ha desplegado una estrategia sistemática de desprestigio, con muchos recursos” contra el mandatario caleño…

Graffiti consultó a Velasco para ampliar el tema, y esto dijo:

El exsenador sostiene que lo que está ocurriendo no es una simple oposición natural a la administración, sino un ataque organizado con varias aristas.

Por un lado, menciona la constante presencia de movilizaciones sociales en diferentes puntos de la ciudad, coincidiendo en el tiempo y abordando distintos temas, lo que genera suspicacias sobre su espontaneidad…

“Uno empieza a notar que hay una movilización social organizada, con presencia en varios puntos de Cali el mismo día, alrededor de distintos temas, pero con una estrategia clara: generar malestar y aprovechar cualquier error de la administración para amplificarlo”, dijo Velasco.

Además, señaló el papel de las redes sociales en esta estrategia, con activismo digital orquestado desde cuentas con pocos seguidores, pero que replican información de manera sistemática.

Según el excongresista, una de las tácticas más recurrentes consiste en tomar un hecho aislado, convertirlo en tendencia y posicionarlo en la opinión pública como si fuera la única realidad de la ciudad.

“No es que no se hayan cometido errores o que no haya temas que generen malestar, pero hay una clara intención de amplificarlos. Sueltan un video, al principio no tiene trascendencia, luego lo van inflando y terminan volviéndolo tendencia”, explicó Velasco.

¿Otro estallido social?

La hipótesis de que esta estrategia busca revivir el estallido social no es nueva, y el mismo alcalde Alejandro Eder lo ha dicho advertido en varias ocasiones… Gabriel Velasco no descarta esa posibilidad y asegura que, además de generar descontento ciudadano, hay una intencionalidad de fondo: mantener a la administración distraída, obligándola a responder permanentemente a la agenda mediática en lugar de enfocarse en la ejecución.

“El problema no es solo la campaña de desprestigio, sino la intención de no dejar gobernar. Mantienen a la administración ocupada dando explicaciones, respondiendo ataques, en lugar de concentrarse en la gestión”, sostuvo el asesor del alcalde.

¿Cómo responder a la estrategia?

Para Velasco, la clave está en “no dar papaya” y evitar errores que puedan ser capitalizados por quienes buscan debilitar la imagen del gobierno local, e insiste en que la mejor forma de contrarrestar estos ataques es llevar la administración directamente a las comunidades, como se está haciendo.

“La estrategia es clara: estar en la calle, cara a cara con el ciudadano, solucionando sus problemas del día a día. Eso es lo que realmente le importa a la gente, no el ruido político”, afirmó.

El costo de recuperar el orden

Velasco también se refirió al impacto que han tenido las medidas de la administración en la percepción de la ciudadanía.

Según él, muchas personas que pedían orden y disciplina en la ciudad ahora sienten molestia cuando las decisiones los afectan directamente.

“Poner en orden una ciudad como Cali duele. Organizar el tráfico, hacer controles al Soat, exigir el uso del casco, sancionar el mal parqueo… todo eso incomoda al principio. Pero a largo plazo, tener una ciudad más segura, con mejor movilidad y recuperación de la malla vial, traerá beneficios para todos”, sostuvo el excongresista.

Velasco considera que hay sectores que se benefician del desorden y que no les interesa que la ciudad se organice.

El trasfondo político

Además de la estrategia de desgaste contra la administración, el exsenador advierte que hay una narrativa que ha sido posicionada con intencionalidad política: la idea de que el gobierno de Alejandro Eder favorece a los ricos y no trabaja por los sectores populares.

“Es una mentira. Pero han venido construyendo esa narrativa y aprovechando ciertas circunstancias para darle fuerza. Buscan revivir la lucha de clases y generar rabia y odio en una ciudad que ya tiene tensiones sociales”, dijo Velasco.

Finalmente, el exsenador puso sobre la mesa un factor determinante: la proximidad del año electoral.

“Ya estamos en campaña y a algunos sectores les conviene desprestigiar al alcalde porque les da réditos políticos y, al mismo tiempo, le quita fuerza a otros que podrían salir bien librados en las próximas elecciones”, concluyó.