¿Quien de los presidenciables del Valle se meterá en la pelea?

Por Mauricio Ríos Giraldo

La campaña presidencial que calienta motores se sentirá mucho en el Valle del Cauca, pues al menos cuatro políticos de este departamento se postularán al primer cargo de la Nación.

Hasta el momento hay cuatro políticos del Valle en el sonajero: la exgobernadora Dilian Francisca Toro, el ministro Carlos Holmes Trujillo, y los senadores Roy Barreras y John Milton Rodríguez.

La pregunta es quién de los cuatro tendrá la fuerza suficiente para mantenerse hasta la primera vuelta y dar la pelea. Hasta el momento ninguno marca en los puestos delanteros de las encuestas -en muchas ni siquiera los incluyen- pero sería un error subestimarlos, porque todos -de una u otra forma- tienen cómo crecer, todo dependerá lo estratégicos que sean.

La exgobernadora Toro es la que más votos tiene de los cuatro, tiene bancada propia -de cinco congresistas- va a asumir como presidenta del Partido de la U, en el que no se vislumbra quién le pueda disputar el aval para la candidatura presidencial, y los que saben de matemática política sostienen que cuenta con un partidor de un millón de votos en el Valle del Cauca. El reto de Dilian es ganar espacio en Bogotá y en otras regiones.

El ministro Trujillo es el que más opción tiene de presentarle resultados inmediatos a los colombianos, por el cargo que ocupa, pero, al mismo tiempo -como con un arma de doble filo-, corre el riesgo de salir quemado si, a la hora de renunciar para candidatizarse, no se ha frenado la seguidilla de masacres y la expansión de grupos armados ilegales. Si Carlos Holmes logra convertirse en “el que diga Uribe” -para lo cual tendrá que enfrentar una dura puja dentro de su partido- automáticamente se metería en la pelea por uno de los cupos a la segunda vuelta.

El senador Barreras no tiene partido, por ahora, y al no tener el favor del Gobierno, como lo tuvo en los cuatro periodos anteriores, puede debilitarse estructuralmente. Eso, muy seguramente, Roy lo sabe, y por eso le apuesta a la opinión, su estrategia está dirigida a convertirse en el catalizador de la insatisfacción ciudadana y, con su referendo revocatorio, podría ganar muchos adeptos. Su dificultad está en que difícilmente la izquierda -aunque lo vea como un aliado ahora- lo arroparía como su candidato.

El senador Rodríguez tiene partido propio, Colombia Justa Libres, que está en proceso de crecimiento, lo que le permitiría dar la pelea en una consulta interpartidista de la derecha, pero sino logra conquistar electores más allá del voto religioso, correría con la misma suerte del exprocurador Alejandro Ordóñez en la campaña de 2018. El reto de John Milton está en mostrarse en capacidad de respetar diferencias y derechos en los que el país ha avanzado y que muchos ven amenazados cuando se mezcla la religión con la política.