Cali, septiembre 15 de 2024. Actualizado: sábado, septiembre 14, 2024 00:35

Rodolfo, el outsider que no fue

Rodolfo, el outsider que no fue

Por: Mauricio Ríos Giraldo

A raíz de la muerte del ingeniero Rodolfo Hernández, mucho se ha especulado sobre cuál sería la situación de Colombia si el excandidato santandereano hubiera ganado las elecciones presidenciales de 2022.

Sin embargo, más allá de lo que habría implicado el fallecimiento de un presidente en ejercicio –lo que habría dado paso a que la vallecaucana Marelen Castillo se convirtiera en la primera mujer en ocupar la Presidencia de Colombia, los análisis sobre el papel de Rodolfo Hernández en la política colombiana deben girar en torno al significado de la gran votación que obtuvo, en el mensaje que dieron los 10.580.412 de ciudadanos que votaron por él…

Hernández no tenía ni medio rasgo de estadista, por el contrario, y pese a haber sido alcalde de Bucaramanga, frecuentemente daba señales de desconocimiento del Estado y del país, de irrespeto por la institucionalidad y las personas, además, siendo candidato, ya tenía en curso un proceso por corrupción, por el que finalmente fue condenado en junio de este año.

¿Por qué en medio de candidatos más preparados, con mejores maneras, con grandes hojas de vida y mayor experiencia en el manejo del Estado, el exalcalde de Bucaramanga, que no cumplía con estas características, fue quien pasó a la segunda vuelta para enfrentar a Gustavo Petro, que era el candidato a vencer?

La respuesta es más que obvia: por el hastío de la inmensa mayoría de los colombianos frente a la clase política; una mezcla de desilusión, cansancio, desconfianza y hasta odio, por tantos y tantos incumplimientos…

Incumplimientos que hoy son más, pues el candidato elegido en 2022, ganó con una promesa de cambio que, dos años y tres meses después de las elecciones, es percibida como una burla aún mayor al electorado.

Todo esto para decir que, al ritmo que van las cosas, el escenario político de Colombia está servido para un nuevo Rodolfo Hernández. Si en 2022 el 47,31% del electorado votó por un outsider, en 2026 pueden ser más los ciudadanos dispuestos a jugársela por un candidato que no represente a los partidos tradicionales, pero tampoco a la izquierda… La oportunidad está servida, falta ver si alguien sabrá aprovecharla.

Comments

martes 3 de septiembre, 2024
ads_top
Powered by Sindyk Content
Arriba