Cali, abril 28 de 2025. Actualizado: domingo, abril 27, 2025 22:34
El superalimento que conquista paladares y protege tu salud
¿Para qué es buena la ahuyama?
La ahuyama, también conocida como calabaza, zapallo o auyama en distintas regiones de América Latina, ha sido durante siglos una aliada silenciosa de la buena salud.
Más allá de su sabor dulce y su versatilidad en la cocina, este fruto esconde una potente combinación de beneficios nutricionales que hoy son reivindicados por expertos en salud y alimentación.
Una fuente generosa de vitaminas y minerales
La ahuyama es, esencialmente, un paquete de nutrientes esenciales.
Es rica en vitamina A, gracias a su alta concentración de betacarotenos, los pigmentos que le otorgan su característico color anaranjado.
La vitamina A es vital para la salud ocular, el fortalecimiento del sistema inmunológico y el mantenimiento de la piel.
“Una porción de ahuyama cocida puede proporcionar hasta el 200% del requerimiento diario de vitamina A en adultos”, destaca la nutricionista Carolina Mejía.
“Esto la convierte en un alimento clave, sobre todo en regiones donde las deficiencias nutricionales son comunes”.
Además, contiene vitaminas C y E, potentes antioxidantes que protegen las células del daño oxidativo, y minerales como potasio, hierro y magnesio, esenciales para el buen funcionamiento cardiovascular y muscular.
Baja en calorías, alta en beneficios
Otra de las grandes ventajas de la ahuyama es su bajo contenido calórico.
Con apenas 26 calorías por cada 100 gramos, es ideal para dietas de control de peso.
Su alta cantidad de fibra favorece la saciedad y contribuye a una digestión saludable.
“La fibra dietética ayuda a regular el tránsito intestinal y a controlar los niveles de azúcar en sangre”, explica Mejía.
“Incorporar ahuyama en sopas, purés o incluso postres permite disfrutar de platos nutritivos, sabrosos y ligeros”.
Propiedades antiinflamatorias y protectoras
Estudios recientes han mostrado que los compuestos antioxidantes presentes en la ahuyama podrían tener efectos antiinflamatorios significativos.
Esto sugiere que su consumo regular podría ayudar a prevenir enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2, enfermedades cardíacas y ciertos tipos de cáncer.
Además, algunas investigaciones preliminares apuntan a que ciertos extractos de semillas de ahuyama tienen efectos positivos sobre la salud prostática en hombres, particularmente en la prevención de la hiperplasia benigna de próstata.
Versatilidad en la cocina
Una de las razones por las cuales la ahuyama nunca pasa de moda es su impresionante versatilidad culinaria.
Se puede asar, hervir, hornear, hacer puré o incluso convertir en deliciosos postres y bebidas.
Desde una tradicional crema de ahuyama hasta panes, muffins, o smoothies, su textura suave y su dulzura natural permiten adaptarla tanto a preparaciones saladas como dulces, satisfaciendo a todos los paladares.
Para los amantes de la gastronomía consciente, también es importante destacar que casi todas las partes de la ahuyama son aprovechables: la pulpa, las semillas —ricas en proteínas y grasas saludables— y hasta las flores.
Un alimento con historia
Originaria de América, la ahuyama ha sido cultivada desde tiempos precolombinos.
Para culturas indígenas como los mayas y los aztecas, la ahuyama era un alimento sagrado, fundamental en la dieta diaria y en ritos ceremoniales.
Hoy, sigue ocupando un lugar central en las cocinas de Colombia, Venezuela, México y muchos otros países, resistiendo el paso del tiempo y adaptándose a las tendencias de alimentación saludable del siglo XXI.
Un superalimento al alcance de todos
En tiempos donde los “superfoods” importados se venden a precios exorbitantes, la ahuyama recuerda que no es necesario buscar muy lejos para comer bien.
Este humilde fruto ofrece una impresionante gama de beneficios a un costo accesible, favoreciendo tanto la salud individual como la seguridad alimentaria.
Incluir ahuyama en la dieta cotidiana no solo enriquece el paladar, sino que representa una apuesta segura por una alimentación más sana, natural y sostenible.
Como dicen los nutricionistas: a veces, los mejores secretos de la salud están escondidos en los alimentos más sencillos.