Juan Camilo Rodríguez, el de las mil palabras

Luis Ángel Muñoz Zúñiga
Especial Diario Occidente

Juan Camilo Rodríguez Barco, reconocido por sus amigos y en los círculos artísticos como “El mil palabras”, es bailarín egresado de Incolballet en el 2020, con estudios de historia en la Universidad del Valle y actualmente lidera un proyecto pedagógico que convoca a los citadinos a caminar por los lugares emblemáticos de la ciudad para conocer nuestra historia caleña.

Juan Camilo Rodríguez tuvo la suerte de nacer en el seno de una familia de artistas e intelectuales, destino que desde su infancia le permitió respirar el mundo artístico.

Por eso cuando se le pregunta por el origen de su vocación, siempre resalta la influencia de su padre Carlos Rodríguez, comunicador social y documentalista de la Universidad del Valle.

Así mismo, extiende su gratitud por su tia, la maestra Lucy Rodríguez, directora del colectivo teatral Escena Maestra del Sutev, y a su padrino Daniel Roncancio, dramaturgo de reconocida trayectoria.

El arte ha sido su constante compañero desde que dio sus primeros pasitos.

“El mil palabras”, muy amable atendió la invitación del Diario Occidente, grata oportunidad para difundir su proyecto cultural.

¿Por qué mil palabras?

Desde el arte, me di cuenta de la riqueza que hallamos al recorrer la ciudad y emprender el conocimiento de nuestra rica historia.

Eso explica el por qué después de formarme como artista decidí ingresar a estudiar historia en la Universidad del Valle.

“El de las mil palabras” es un proyecto que decido emprender inmediatamente termina la pandemia del Covid y cuando se dio el estallido social.

Lo inicié a través de las redes sociales, porque me di cuenta que los caleños no conocemos completamente la historia de nuestra ciudad y que, en la rutina diaria, pasábamos por alto los pequeños detalles y secretos que cada lugar ofrece.

Con nuestro colectivo produjimos videos de historia tras explorar cada rincón de la ciudad, desde Siloé hasta el centro de Cali; desde San Antonio hasta los diversos monumentos e incluso Juanchito.

¿Cuáles son los objetivos del proyecto?

Nuestro objetivo será la motivación para que los citadinos, especialmente el público joven, se interesen en conocer su entorno y en comprender su historia.

Este proyecto nos ha permitido reconocer diversos procesos de construcción de ciudad, motivándonos a trazarnos un objetivo común: explorar la ciudad, sumergirnos en sus dinámicas y tejer lazos con la comunidad.

“El de las mil palabras”, además de crear documentales que ofrecemos en las redes sociales, también convoca a caminar por los espacios, interactuar con los personajes, integrarnos a las fiestas populares e investigar las historias desde los lugares donde ocurrieron los hechos sociales.

En otras palabras, a convertirnos en turistas de nuestra propia ciudad y tener la oportunidad de protagonizar la historia y participar de la cultura citadina.

En mi caso personal, desde que inicié mis estudios universitarios, mi interés fundamental ha girado en torno a la historia, el arte y la cultura.

Mi trabajo de grado estará centrado en estos temas.

¿Cuál ha sido el impacto?

El impacto es increíblemente gratificante.

Gracias a los videos de historia, la gente se siente mucho más cercana a su propia ciudad y su país.

Los comentarios que hemos recibido han sido positivos y llenos de esperanza, lo que nos llena de alegría porque sabemos que estamos contribuyendo al fortalecimiento de la cultura local.

Algunas personas confiesan que gracias a los videos han comenzado a tener fe y a querer más a este país.

Otros, que han descubierto datos interesantes sobre sus propios barrios, e incluso ha habido quienes han utilizado la información de los videos para hacer enamorar.

Hemos recibido el reconocimiento y el apoyo de la Universidad del Valle, de los museos, de medios de comunicación e incluso de algunos miembros de la Academia de Historia de Cali.

Es un honor.

Ellos saben que estamos haciendo las cosas bien, aunque sea poco a poco.

Es gratificante el apoyo incondicional de nuestros amigos, en las jornadas de grabación, sus críticas son enriquecedoras para poder continuar con nuestro proyecto.

¿Balance del primer recorrido de ciudad?

Conjuntamente con Ricardo Realpe, miembro de la Academia de Historia, dictamos charlas sobre la historia de la Avenida Colombia, apoyados con fotografías del archivo del Banco de la República.

Recorrimos el boulevard del río haciendo exposiciones y conferencias al público mayor, que se mostró habido, participativo, curioso y con ganas de saber más.

Por eso pronto programaremos otros recorridos.

Quedamos emocionados por la receptividad de las audiencias diversas y esperamos continuar generando interés y entusiasmo en nuestras comunidades.

¿Críticas sobre esta realidad?

Hay heridas que sanar y aspectos por mejorar en nuestra ciudad.

Es hora de dejar de esperar pasivamente y comenzar acciones.

Necesitamos más arte en nuestras vidas, en nuestra educación y en nuestra comprensión de la historia, ya que es una herramienta poderosa para transformar nuestra vida y la de los demás.

Nos queda mucho por hacer.

Son esperanzadores la cantidad de procesos artísticos, culturales e históricos de nuestra ciudad, impulsados por diversos actores de la sociedad.

Es gratificante ver cómo cada vez más personas buscan contribuir al crecimiento y enriquecimiento de Cali desde diferentes perspectivas.

Esto demuestra un compromiso creciente con el desarrollo integral de nuestra comunidad.

Eso nos inspira a seguir adelante con nuestro proyecto que contribuye con la construcción de una ciudad más vibrante, inclusiva y llena de oportunidades para todos.

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