Pasajeros de un vuelo de Avianca vivieron momentos de pánico por un joven que habría impedido el despegue

Un incidente causó alarma y pánico entre los pasajeros de un vuelo de Avianca por un joven que, al parecer, habría impedido el despegue de la aeronave que cubría la ruta Bucaramanga–Bogotá.

El hecho ocurrió el 31 de agosto y quedó registrado en videos compartidos por usuarios en redes sociales.

De acuerdo con testigos, un joven comenzó a gritar dentro de la cabina asegurando que la tripulación no debía permitir el despegue.

En medio de su alteración, habría expresado frases como “Les estoy dando la oportunidad” y “Ustedes dirán si me bajo o no”, lo que aumentó la tensión entre los viajeros.

Los pasajeros señalaron que el sujeto mencionaba consumir psicotrópicos y hacía referencias constantes a su familia, asegurando que su vida corría peligro.

Esto incrementó la incertidumbre, pues algunos pensaron que podía tratarse de una amenaza más grave. Una de las pasajeras relató que en el avión viajaba incluso una mujer embarazada de siete meses, lo que generó aún más preocupación.

Ante la situación, la tripulación activó los protocolos de seguridad y el avión regresó a la plataforma. Los pasajeros fueron evacuados junto con su equipaje de mano, mientras personal especializado revisaba la aeronave en busca de posibles artefactos o elementos de riesgo.

El joven finalmente fue retirado del avión y puesto a disposición de la Policía para determinar si estaba bajo efectos de sustancias o atravesaba una crisis de salud mental.

En un comunicado oficial, Avianca confirmó lo sucedido y explicó que “tras el embarque del vuelo AV8579 del 31 de agosto, un pasajero presentó un comportamiento inadecuado y disruptivo.

El avión regresó a la plataforma para remitir al pasajero a sanidad aeroportuaria y llevar a cabo un proceso de desembarque y revisión de seguridad, tras lo cual se retomó el vuelo”.

La aerolínea reiteró su política de cero tolerancia frente a conductas que afecten la seguridad e hizo un llamado a las autoridades para endurecer sanciones a quienes reincidan en este tipo de comportamientos. “Seguiremos utilizando todas las herramientas civiles y penales para proteger a nuestros clientes y colaboradores”, señaló la compañía.

El caso abrió nuevamente el debate sobre la seguridad aérea y la importancia de reforzar los controles preventivos para garantizar la tranquilidad de los viajeros.

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