Cali, enero 2 de 2025. Actualizado: martes, diciembre 31, 2024 00:08
Pa’lante Colombia
Triste decirlo y, hasta penoso, pero en nuestro país todavía existen miles de personas ignorantes, de esas que no les gusta leer, analizar y enterarse, conocer antecedentes, historia, de como carajos ha sido nuestro pasado, nuestro presente y nuestro futuro.
Esos, en gran parte, votaron y defienden al presidente Petro, salvo los cinco o seis millones que se arrepintieron de elegirlo cuando empezaron a darse cuenta cuáles eran sus verdaderas intenciones y objetivos.
Es cierto que esa elección se dio por culpa de la clase política tradicional que durante años se turnaron el poder para gobernar para la élite, para los amigos, para la tribuna y también para llenarse los bolsillos, olvidando la Colombia profunda, esa que ha sabido aprovechar el actual gobierno para decir mentiras, inventar fantasías y crear una atmósfera enrevesada que solo destroza a un país tan hermoso como el nuestro.
De eso proviene ese karma que nos cayó encima actualmente.
Un karma peor, dónde la izquierda, haciendo uso de su filosofía marxista, trata de crear pobreza en la nación para poder dominarla a través de sus ideales asistencialistas, como en todos los países que practican esa ideología; de acabar con el empresariado por inconvenientes para sus principios políticos; con el bienestar social como la salud, el trabajo, las pensiones, por mencionar algunas, consideradas por ellos como logros burgueses.
Esa es, lamentablemente, la intención de suprimir alegrías, estabilidades y cambiarlas por el color gris, por humo, por falencias en general.
Se reitera que a Petro le faltan un poco menos de veinte meses para terminar su período presidencial, como una esperanza ante tanta preocupación nacional pero, me atrevo a decir que todavía faltan, por parte de este gobierno, tomar medidas que pueden ser incongruentes e inconveniente como, por ejemplo, lograr que el Banco de la República emita billetes como en la Argentina, decirle al país que Colpensiones se quedó sin dinero para pagar a los pensionados y que, como no hay presupuesto para el deporte ni para la salud, se le ayudará con envío de auxilios en dólares a Cuba y se le ayudará a la economía venezolana comprando petróleo sin refinar y gas de mala calidad.
Se dirá que como somos resilientes, resistamos hasta que Dios recuerde que Colombia sigue siendo uno de los países más católicos del mundo así no tengamos la bendición del peronista Papa Francisco.