Cali, agosto 2 de 2025. Actualizado: sábado, agosto 2, 2025 00:07
Vecinos rociaron agua bendita
¿Ritual de brujería en Cali?: encuentran cabra sin cabeza en bolsa de basura
Un hecho inusual alteró la tranquilidad en el barrio Mariano Ramos, al oriente de Cali. Una cabra sin cabeza en una bolsa de basura fue encontrada frente a una iglesia católica, lo que despertó temor entre los habitantes del sector, quienes relacionaron el hecho con un posible ritual de brujería.
El cuerpo del animal estaba ubicado justo en la entrada principal de la parroquia, en la intersección de la carrera 49 con calle 44.
Vecinos actuaron
Los primeros en ver la escena fueron feligreses que llegaban a la misa matutina. Al notar la presencia del animal decapitado, varios residentes comenzaron a rociarle agua bendita, creyendo que se trataba de un acto espiritual dirigido contra la comunidad religiosa.
La utilización de animales sacrificados suele asociarse con prácticas de origen esotérico. En contextos rituales, elementos como cabras, velas, sangre y símbolos son empleados para ofrendas o invocaciones.
Dependiendo del tipo de ceremonia, estos objetos pueden tener significados específicos, como romper energías o manifestar rechazo hacia instituciones religiosas. La cabra, en particular, aparece con frecuencia en rituales considerados de carácter ocultista.
Prácticas con animales
En estos contextos, cabras, aves o gatos son ofrecidos como parte de ceremonias que pueden incluir velas, símbolos o rezos específicos.
Estos actos, aunque clandestinos, suelen realizarse en sitios con carga espiritual, como iglesias, cementerios o esquinas donde confluyen caminos.
La presencia de un animal decapitado en una parroquia puede interpretarse como una acción dirigida a quebrantar la energía del lugar o desafiar su significado religioso.
Por esa razón, líderes religiosos recomiendan no tocar estos elementos. El contacto con objetos involucrados en rituales podría transferir simbólicamente la intención del acto a quien los manipula, según creencias tradicionales.
En lugar de intervenir directamente, se sugiere avisar de inmediato a las autoridades religiosas o policiales.
El párroco, con apoyo de la comunidad, puede realizar actos de limpieza espiritual como bendiciones, oraciones o celebraciones litúrgicas que buscan neutralizar cualquier efecto negativo.
Para quienes presencian o se ven afectados por estos eventos, una medida común de protección es el uso de sacramentales como el agua bendita, medallas o cruces.
También se recomienda mantener una vida de oración activa, asistir a los sacramentos y fortalecer la vida comunitaria como forma de defensa ante posibles agresiones espirituales.