Polémica por traslado de árboles para graderías de la Feria de Cali

Un grupo de árboles sembrados en el separador vial de la Calle 26, en Cali, entró en el centro de una discusión pública.

La inquietud surge por la posibilidad de que alrededor de 70 ejemplares sean trasladados para permitir el montaje de graderías temporales, necesarias para el desarrollo de uno de los desfiles más esperados durante la Feria de Cali.

La información sobre la intervención al espacio motivó manifestaciones ciudadanas, con expresiones de desacuerdo frente a cualquier acción que implique modificar el entorno vegetal existente.

El término “arboricidio” fue utilizado por algunos que consideran que esta medida afectaría el ecosistema urbano, alertando sobre posibles impactos en sombra, biodiversidad y calidad del aire.

A través de carteles y encuentros comunitarios, algunas personas buscan llamar la atención sobre la relevancia ambiental de los árboles en ese tramo vial.

Autoridades ambientales explican el proceso

Desde el Dagma se explicó que no se planea talar los árboles. Según lo indicado, la propuesta contempla su reubicación dentro de la misma zona, como parte de un ejercicio de adecuación del espacio urbano con motivo del evento ferial.

Este movimiento, señalan, se desarrollaría bajo criterios técnicos de manejo forestal y con acompañamiento de la comunidad.

La Alcaldía aclaró que se trata de una intervención programada con fines de embellecimiento y aprovechamiento del espacio público, en la que se considerará tanto el componente ambiental como el cultural.

El Dagma también informó que, en una fase inicial, se evaluó trasladar los árboles fuera del sector, pero estudios recientes apuntan a una posible reubicación dentro del mismo entorno, minimizando así el impacto ambiental.

De acuerdo con la información oficial, las decisiones definitivas se tomarán en conjunto con actores comunitarios, priorizando una solución que permita mantener el evento sin afectar el equilibrio ecológico del área.

El propósito, insisten, es generar beneficios mutuos: preservar el valor del arbolado y garantizar el desarrollo de una actividad cultural de interés general.

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